Las irregularidades de la auditoría de 1982, motivo de la decisión adoptada contra la federación

El Secretario de Estado para el Deporte, Romà Cuyàs, anunció ayer, en el transcurso de un almuerzo ofrecido a los medios de información, que por medio de una orden ministerial han quedado suspendidas la "concesión y pago de cualquier tipo de subvención que, con cargo a los presupuestos generales del Estado, pudiera corresponder a la Federación Española de Fútbol". El ministro de Cultura ha tomado esta decisión como consecuencia de la ausencia de dictamen en la auditoría correspondiente a 1982, que obliga a actuar de acuerdo con la ley.

Romà Cuyàs, que explicó durante dos horas los trabajos y proyectos a los que se ha dedicado durante los seis meses de su mandato, anunció al final la decisión de retirar las subvenciones a la Federación Española de Fútbol. "No me corresponde pedir dimisiones ni hacer guerras, pero sí me corresponde ser sensible a lo que pueda producirse en el mundo del deporte". Cuyàs respondió así al extendido rumor de que iba a pedir la dimisión de Pablo Porta, pero añadió: "todo aquello que afecta al fútbol tiene una mayor resonancia y afecta al resto de los deportes. Entiendo que la Federación tiene un papel importante en la promoción del fútbol, pero ello pasa por la separación del campo amateur del profesional. En estos momentos se ha producido un rompimiento en la negociación colectiva con la AFE y me anuncian que se van a producir una gran cantidad de impagos"."La situación de crisis e inestabilidad", añadió, "puede producir una degradación que en la administración no queremos que se produzca. El congreso que se acaba de celebrar ha aprobado medidas que están en contra de lo que se está haciendo en el resto de Europa. El deporte amateur debe ser el objetivo básico de su actuación. Como Gobierno nos preocupa el conjunto de situaciones dadas, y consideramos necesario reordenar y clasificar las cuestiones para superar la crisis".

Romà Cuyàs, tras leer la orden ministerial explicó que la auditoría del fútbol, por su magnitud, es la más significativa. El dictamen de los auditores -José Antonio Rodríguez Rubio y Pelayo Romero, designados por sorteo porque la Federación rechazó a los dos designados en principio- señala precisamente la imposibilidad de emitirlo. Tres organismos dependen de la Federación Española de Fútbol y los auditores señalan que únicamente han obtenido información del organismo central. Entre otras cosas no ha sido posible obtener datos de los contratos del Mundial 82".

Porta anunció su dimisión

Según aseguró el secretario de Estado para el Deporte, Pablo Porta le anunció hace poco más de un mes, en presencia de Daniel Romero, director de Deportes, que tenía intención de dimitir. A la pregunta de la situación actual de la auditoría de 1978, Cuyàs afirmó que "el fiscal del Tribunal de Cuentas ha recurrido la sentencia". Dijo también que "la medida adoptada es por el interés del fútbol y del propio deporte. No hay en esto ninguna acusación ni actitud preconcebida contra los estamentos federativos y los clubes que lo componen, pero el fútbol también ha de dar ejemplo".Según manifestó posteriormente el secretario de Estado para el Deporte hay otras federaciones nacionales que pueden tener problemas con sus auditorías, y alguna cuyo dictamen ha sido negativo no tendrán grandes dificultades para subsanar sus anomalías. Respecto al papel de federaciones y clubes señaló que en ningún modo desde el Consejo se considera inválida su capacidad instrumental y que por tanto las subvenciones federativas seguirán existiendo, pero se va a poner en práctica un nuevo criterio en su reparto.

"Hasta ahora" dijo Cuyàs, "se hacía un reparto no conflictivo con el deseo de contentar a todos, con lo cual no se contentaba a nadie y no había dinero para promover los deportes básicos. Las subvenciones de la Administración han de estar destinadas en el futuro a promover la actividad deportiva y no a pagar los gastos generales. Habrá una reducción en las cantidades, que se autorizarán para gastos generales, y se restringirán los sueldos de los colaboradores federativos".

Descontrol

Para el futuro, el Consejo Superior de Deportes facilitará a las pequeñas federaciones la realización de sus propias contabilidades. Hasta el momento presente, y de acuerdo con los resultados de las auditorías de 1982, no se siguen procedimientos adecuados. "Sorprendentemente", dijo Cuyàs, "en las federaciones nacionales no existe conocimiento de la utlización que hacen del dinero las federaciones territoriales. La fiscalización de sus gasto y su actividad, por tanto, se hace imposible. En ocasiones se encuentra un simple recibo"."Las normas que vamos a. proponer", añadió, "de acuerdo con la Intervención General del Estado, van a ser más escrupulosas. Es criterio del Tribunal de Cuentas que los recurseis propios de las federaciones sean analizados igual que los que provienen de la subvencíón. No se van a admitir las dobles cajas".

"La contabilidad debe ser global sobre el total de los recursos. A primeros de octubre comenzará un cursillo del plan contable para los responsables fiscales y contables de las federaciones. Las auditorías no quedarán reducidas al primer nivel de la subvención; todos aquellos clubes que reciban alguna cantidad significativa tendrán que someterse igualmente a una fiscalización".