El cohete europeo Ariane fue lanzado ayer con pleno éxito desde la Guyana francesa

Los problemas que se encontraban en el origen del fracaso del último lanzamiento del cohete europeo Ariane han sido resueltos, señalaba un portavoz oficial de la Agencia Espacial Europea, minutos después de haberse verificado con toda normalidad el lanzamiento del Ariane, a las 8.59 horas de ayer (13,59 hora peninsular), desde el centro espacial europeo de la Guyana francesa.

El éxito del lanzamiento se conoció a los diecisiete minutos de la hora cero, cuando ya se habían separado correctamente las tres etapas y los dos satélites que transportaba el lanzador. Uno de los objetivos más importantes de esta misión era precisamente demostrar que se habían superado los fallos técnicos que provocaron el fracaso en el mes de septiembre pasado.El Ariane ascendió majestuosamente sobre el fondo de la selva de Guyana y se alcanzó a distinguir la separación de la primera etapa, que dejó un rastro de vapor en forma de espiral. La separación de la segunda etapa provocó los primeros aplausos en el centro de control Júpiter, situado a unos diez kilómetros de la plataforma de lanzamiento, aplausos que se repitieron en los minutos siguientes, a medida que se verificaban con toda normalidad las operaciones previstas.

Este lanzamiento del Ariane, dentro del proyecto de la Agencia Espacial Europea (ESA), en el que España tiene una reducida participación de un 2%, era esperado con interés. No se trataba solamente de demostrar la fiabilidad del cohete europeo, tras el fracaso del último lanzamiento, sino también de probar el nuevo sistema que permite al Ariane transportar dos satélites al mismo tiempo, satélites que se separan de forma consecutiva de la tercera etapa del cohete y son situados en órbita de transferencia geostacionaria o elíptica, según las necesidades.

Dos pasajeros

Los dos pasajeros del Ariane en este vuelo, situados dentro de la estructura Sylda (sistema de lanzamiento doble Ariane), han sido los satélites Ecs-1 y Amsat. El Ecs-1, que quedó situado en su órbita de transferencia geostacionaria tras su desprendimiento a los quince minutos del lanzamiento, es el primero de una serie que pondrá en órbita la nueva organización europea de telecomunicaciones por satélite Eutelsat. Además de telefonia y comunicaciones públicas en Europa, el satélite servirá a la Unión Europea de Radiodifusión para transmitir programas por la red de Eurovisión y para el intercambio de programas de TV entre países europeos.Si tiene éxito la operación de encendido del motor de apogeo del Ecs-1, prevista para la noche de hoy, el satélite quedará situado en la órbita geostacionaria, a 36.000 kilómetros sobre el Ecuador, en una posición de 100 Este.

El otro pasajero ha sido el Amsat, un nuevo satélite para radioaficionados que ha sido realizado por equipos de varias universidades europeas. Con un costo muy bajo, financiado por diversas industrias, la agencia espacial norteamericana y también por radioaficionados privados, entre ellos el rey Hussein de Jordania, su misión es la experimentación en el campo de las comunicaciones y la utilización en caso de catástrofes naturales.

Cooperación internacional

El proyecto Ariane es una muestra de cooperación internacional, que además tiene la virtud de ilusionar a los que en él participan. Cuando se realizó la última operación de lanzamiento, a los diecisiete minutos del despegue, la separación del satélite Amsat, los aplausos y felicitaciones mutuas fueron generales entre los técnicos de la sala de control, visitantes y autoridades que se habían desplazado hasta la Guyana francesa para el lanzamiento. Entre ellos estaba el ministro francés de Industria e Investigación, Laurent Fabius.Los expertos aquí reunidos señalan que no se trata únicamente de un proyecto de interés científico, puesto que tiene una importantísima vertiente comercial.

Con este lanzamiento, el Ariane entra en la etapa final de su fase promocional. A partir de marzo de 1984 empezará la fase comercial, y pasará a ser explotado por una compañía privada, Arianespace, la primera empresa comercial de transporte espacial del mundo.