UGT-Gobierno: relaciones tensas
Ayer se inició en Madrid el 33º Congreso federal de la UGT. El alcalde Tierno Galván ofreció la banda del municipio para obsequiar a los delegados con los acordes de la Internacional. Más tarde, y en unas palabras de bienvenida, subrayó el paralelismo entre el trabajo de los sindicalistas y el de los ediles municipales. Es un trabajo que no se dirige hacia el desarrollo, sino hacia el progreso. Obsérvese el matiz. Y en seguida habló Alfonso Guerra, vicepresidente del Gobierno, en representación de Felipe González, presidente, quien recorre en misión oficial algunos países de Centroamérica y el Caribe. El señor Guerra repudió la actitud de algunos agoreros que exhiben un escepticismo racional ante el futuro del desempleo. Entre los bastidores del Congreso se interpretó ese repudio como un flagelamiento político en las espaldas del ministro de Industria, Carlos Solchaga, un hombre que duda, desde una perspectiva racionalista, de que en tres años y medio puedan crearse 800.000 puestos de trabajo. El señor Guerra dijo que el Gobierno cumplirá todos los puntos de su compromiso electoral. 2 de junio
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