El Gobierno de Vitoria califica los ataques de Guerra al PNV como "pérdida de dignidad de un cargo"

Los duros ataques formulados por el vicepresidente del Gobierno español Alfonso Guerra, contra los nacionalistas vascos en el curso de un acto celebrado anteayer en Vitoria, revelan la "pérdida de dignidad de un cargo", en opinión del portavoz del Ejecutivo autónomo, Pedro Miguel Etxenike. En el curso de una conferencia de prensa, que tuvo lugar ayer en Ajuria Enea, el representante del Gobierno vasco señaló que la intervención de Alfonso Guerra le producía "pena y vergüenza".Asimismo, precisó que la propuesta de entablar un diálogo expuesta por el dirigente socialista es una mera repetición" de la oferta lanzada por Felipe González en la pasada campaña electoral,

Insistía el portavoz del Ejecutivo vasco en que el PSOE se está poniendo "especialmente nervioso" en su campaña electoral en el País Vasco, a medida que se aproximan las fechas de la cita ciudadana con las urnas. "Siento pena y vergüenza por la intervención de Alfonso Guerra", señaló, "al ver cómo puede perder la dignidad de su cargo atacando e insultando a instituciones y al propio presidente del Gobierno vasco".

Después de recordar que cuando Carlos Garaikoetxea fue proclamado, hace tres años, presidente del Gobierno autónomo y partía de cero para crear una infraestructura administrativa propia y unos planes económicos nuevos, Pedro Miguel Etxenike matizó que no se puede olvidar que "en tres años se ha avanzado tanto".

En este sentido, volvió a referirse al mitin electoral del vicepresidente del Gobierno español, en el que criticaba duramente a los nacionalistas vacos, para decir: "El mensaje de Alfonso Guerra, aparte de ser un insulto -el insulto siempre desprestigia a quien lo practicame parece una memez".

En el mismo tono en que se explicara el lendakari -cuando realizaba balance ante los medios informativos de la gestión de su Gabinete durante los tres años de mandato-, el portavoz del Ejecutivo recordó que desde el pasado 28 de octubre todavía no se ha formalizado un solo acuerdo de transferencias, a pesar de las promesas socialistas. "La oferta de diálogo que Felipe González lanzó en el velódromo de Anoeta en la pasada campaña electoral, todavía no ha comenzado".