Posibilidad de llegar a un mayor endeudamiento

El CDS cree que la situación económica del Ayuntamiento de Madrid "está moderadamente saneada, sobre todo teniendo en cuenta la aportación de los Presupuestos del Estado en el ejercicio de 1983 y la liquidación, también con cargo a ellos, de la deuda (amortización de intereses) correspondiente a ejercicios anteriores, incluido además, el déficit del transporte urbano".El programa electoral señala que la incidencia de la fiscalidad por ciudadano no puede decirse de modo abstracto que sea cuantitativamente importante, "y ni tan siquiera la presión fiscal municipal es superior a la existente en 1976". "Pero también es cierto", añade "que las circunstancias de crisis económica profunda en que nos hallamos aconsejan, siquiera sea por razones de estabilidad política y social, mantener los niveles actuales cuando, además, otros esfuerzos solidarios aún no realizados, como la mejora de la gestión y la disminución de ciertos gastos, permiten razonablemente prever que las necesidades urbanas, no sólo ordinarias sino también de inversiones, pueden ser perfectamente atendidas".

En lo que se refiere al presupuesto ordinario, el CDS propugna, en el capítulo de ingresos, la estabilidad de la fiscalídad municipal durante dos años (salvo las tasas, que se aplican siempre según el coste del servicio), mejora de la gestión, ingresos patrimoniales, subvención estatal por el gasto que supone la capitalidad y aumento del 100% en cuatro años por lo que se refiere a las asignaciones del Estado. Respecto a los gastos, recoge la congelación de plantillas y vacantes, salvo en la Policía Municipal; congelación de gastos voluntarios y políticos; ahorro por fluidez y rapidez en los pagos, y economías en las licitaciones.

Inversión de 100.000 millones

En cuanto al presupuesto de inversiones, el programa prevé para el cuatrienío unos. ingresos de 65.000 millones de pesetas en operaciones de crédito, lo que situaría el índice de endeudamiento en torno al 20%; 20.000 millones por mejora en la gestión recaudatoria, partiendo de que el informe o auditoría del Ministerio de Hacienda expresa que en 1982 hubo "una omisión de ingresos" superior a los 10.000 millones; y 15.000 millones de pesetas procedentes de aportaciones del Estado, de la subvención de capitalidad, en su caso, y de imposición propia.

El CDS detalla de esta forma en qué gastaría los 100.000 millones de pesetas que resultan de esa suma de ingresos para inversiones: 47.000 millones, para obras y servicios básicos esenciales en los barrios; 10. 100, para educación y cultura; 9.000, en circulación y transportes; 8.000, en seguridad ciudadana; 6.500, para abastos, mercados y comercio; 5.800, destinados a saneamiento y medio ambiente; 4.000, a urbanismo, vivienda y ecología, y el resto, que especifica el programa, se reparte entre administración, fomento y sanidad y asistencia social. Según el CDS, tal presupuesto de inversiones significaría "el mayor esfuerzo económico y de objetivos realizado por el Ayuntamiento en su historia".