180 empresas acogidas al plan de reconversión textil triplicaron la inversión del sector

La industria textil española triplicó su inversión durante el primer año de vigencia del plan de reconversión textil, según se deduce de la memoria anual publicada por la gerencia del citado plan, a la que ha tenido acceso este diario. A 41.461 millones de pesetas ascendió el compromiso de inversión en inmovilizado material -con ayudas oficiales- comprometido por las 180 empresas del sector que se acogieron en 1982 al plan. Estas inversiones, periodificadas en tres años, suponen triplicar la cifra anual de 6.000 millones de pesetas, hasta ahora registrada en todo el sector textil, que agrupa a cerca de 400.000 trabajadores

Los 180 planes de reconversión aprobados suponen menos de la mitad del total de las solicitudes presentadas a la gerencia del plan de reconversión. En el período comprendido entre octubre de 1981 y diciembre de 1.982 las solicitudes ascendieron a 490, cifra que se ha elevado actualmente a 544. El volumen de inversiones propuesto en las solicitudes del primer año de vigencia del plan, contemplaba una cifra de 134.532 millones de pesetas, lo que significa prácticamente la totalidad de las inversiones previstas durante los cinco años de vigencia del plan. La variación de las plantillas previstas en los 490 primeros expedientes, equivaldría a una disminución de 7.889 puestos de trabajo, lo que suponía, aproximadamente, el 8% del total de las plantillas globales de las empresas solicitantes.Este porcentaje, que se mantiene en una proporción similar en los expedientes aprobados, contrasta con las importantes, reducciones de puestos de trabajo registradas en el sector mediante los planes de reestructuración subsectorial aplicados con anterioridad. La disminución de las plantillas, sin embargo, continúa provocando un goteo constante en la industria textil, pero los mecanismos escogidos parecen haberse desviado hacia los expedientes de regulación de empleo comunes o hacia los despidos individuales y cierres de empresas.

Sectores y zonas

Los subsectores de algodón, género de punto y lana representan en conjunto el 55% del total de las solicitudes recibidas por la dirección del plan de reconversión. Geográficamente, Cataluña, donde se concentran las dos terceras partes de la industria textil española, presentó el mayor número de solicitudes, seguida del País Valenciano y de Madrid.La comisión ejecutiva del plan de reconversión textil, en la que intervienen representantes de todos los ministerios económicos, aprobó hasta el 31 de diciembre de 1982 un total de 180 expedientes. Según los últimos datos, esta cifra alcanza en la actualidad a 216 planes. La incidencia del primer año de actuación del plan de reconversión es especialmente significativa en la industria textil propiamente dicha, a la que pertenecen 164 empresas acogidas al plan, con una plantilla total de 36.912 trabajadores. Los subsectores de fibras y confección se sitúan a continuación, mientras que la principal incidencia se registró en empresas de mediana magnitud.

La concentración geográfica de la actividad textil en Cataluña y en el País Valenciano guarda una equivalencia proporcional al número de expedientes aprobados por el plan (72% y 15% respectivamente del total de planes en marcha). Respecto a la incidencia sectorial, pertenecen al subsector del algodón el 32% de las empresas con programas de reconversión aprobados. La lana (18%), la industria de géneros de punto (16,6%), el sector de la seda (10%), el ramo del agua (8%) y la confección, figuran a continuación. El plan prevé unas inversiones de modernización de maquinaria de 143.000 millones de pesetas constantes, durante su período de vigencia de cinco años. De forma indirecta, fue prevista una inversión en capítulos intangibles -destinados en este sector a innovaciones, moda, publicidad exterior y política de marcas- de 21.200 millones de pesetas. Los programas de reconversión aprobados por la comisión ejecutiva del plan durante 1981 y 1982 incluyen unas inversiones totales equivalentes a 46.305 millones de pesetas, cuya ejecución se llevará a cabo durante los tres ejercicios de 1982, 1983 y 1984.

De la cifra total comprometida, 4.844 millones de pesetas corresponden a la partida de activos intangibles, mientras que el resto pertenece a inmovilizados materiales. Aunque las inversiones totales aprobadas en 1982 superan las previsiones del plan para dicho año, la periodificación de las inversiones ha comprometido elevados procentajes de inversión durante el presente año y 1984.

Las ayudas públicas

Las ayudas públicas concedidas a las 180 primeras empresas acogidas al plan de reconversión ascendieron a 29.000 millones de pesetas, destinadas a la inversión y al saneamiento financiero de las industrias. Un total de 13.280 millones de pesetas fueron aprobadas mediante subvención pública concedida a las empresas y periodificada entre 1982 y 1984. Los créditos oficiales ascendieron a 12.941 millones de pesetas, mientras que fueron concedidos avales por el Instituto de Crédito Oficial por un valor de 1.828 millones de pesetas.En cuanto a los beneficios fiscales contemplados en el plan de reconversión, se estima que las bonificaciones de derechos arancelarios ascienden a unos 3.700 millones de pesetas. Las empresas, en contrapartida a las ayudas oficiales concedidas, aportaron fondos propios mediante ampliaciones de capital y otras medidas diversas por una cuantía aproximada durante 1981 y 1982 de 23.230 millones de pesetas.

En los sectores con mayor inversión en maquinaria textil, especialmente el algodón y la seda, la compra de maquinaria se ha efectuado en mayor medida a través de la importación. En conjunto, la inversión en bienes de importación, excluido el subsector de fibras, alcanza con los aranceles el 50% de la inversión, mientras que las compras nacionales alcanzan a la otra mitad de la inversión.

La incidencia del primer año de vigencia del plan de reconversión sobre el empleo del sector ha sido estimada, según la gerencia del plan, en una cifra muy inferior a la prevista. Mientras que las reducciones de puestos de trabajo previstas ascendían al 20% de las plantillas acogidas a los respectivos programas, los resultados experimentados afectaron sólo al 8%.

No ha sido evaluado el coste real de las jubilaciones anticipadas e indemnizaciones por rescisiones de contrato a los trabajadores, que afectaron a un total de 4.931 personas, aproximadamente el 8% del total de las plantillas de empresas acogidas al plan, según la primera memoria. Asimismo, un total de catorce empresas con programas de reconversión aprobados obtuvieron, mediante su acogimiento al plan, aplazamientos de deudas a la Seguridad Social por un importe de 2.567 millones de pesetas. Un número mucho más importante de empresas pactaron aplazamientos de pago de forma directa, entre las que se encuentran en Cataluña varias empresas que presumiblemente cometieron irregularidades administrativas destinadas a falsear y disminuir la deuda contraída con la Seguridad Social.