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El desenlace de la crisis de Rumasa

La expropiación se extenderá a todas las empresas dominadas por Rumasa, incluidas las minoritarias

Todas las empresas gestionadas por Rumasa, incluidas las que no aparecen en la lista publicada el jueves por el Boletín Oficial del Estado, serán objeto de expropiación, según fuentes próximas a los nuevos administradores. Las primeras gestiones de éstos han sido conocer el número exacto de empresas en manos del grupo de Ruiz-Mateos, procurar el normal funcionamiento de las mismas y cesar a los consejos de administración y consejeros delegados que no tuvieran poderes, es decir, los que no asumían funciones ejecutivas de dirección.

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La ocasión fijada para presentar la lista definitiva de empresas, que costará de numerosas incorporaciones a las ya conocidas, es el próximo martes, al llevar al Pleno del Congreso la convalidación del decreto-ley. Entre los nuevos responsables del holding, dependiente ahora de la Dirección General del Patrimonio del Estado, del Ministerio de Economía y Hacienda, circulaba ayer la impresión de que aparecerán todas las empresas gestionadas por personas dependientes del grupo, con inclusión de las participadas con una minoría del capital que sea de dominio.El decreto-ley publicado esta semana determinaba dentro de las medidas de expropiación, además de los bancos, la de todo el grupo de sociedades, que constituye una unidad de dirección y riesgo". Se basaba dicha extensión en la complejidad del "gran número de sociedades matrices y filiales, que dominan o son dominadas por banco".Sociedades excluidasSin embargo, pese a que las más recientes notas del grupo hablaban de unas cuatrocientas empresas, la relación de bancos y empresas recogida en el anexo del decreto-ley era de 231 De ellas; tres sociedades con participación muy minoritaria fueron excluidas ayer, mediante una corrección de errores a dicha disposición: Roca Radiadores, Fletamentos Marítimos y Túneles del Tibidabo. Una de las correcciones precisa que el importe del justiprecio que percibirán los accionistas de las empresas expropiadas será abonado por el Estado en el plazo de los tres meses siguientes a la fecha del acuerdo de las partes o de la resolución del jurado, y que al mismo se añadirá el interés básico del Banco de España (8% anual) desde la expropiación hasta entonces.

Los administradores generales, cuyo nombramiento fue difundido en la noche del jueves, habían iniciado sus funciones al mediodía. Se trata de Jaime Isac, José Luis Ruiz Ayúcar, Juan Barrios de Frutos, y José Luis Jiménez. Los cuatro tienen funciones de administradores generales; el primero, además, la de coordinador. Isac es abogado del Estado y desempeña desde hace más de un año la presidencia de la comisión liquidadora de Fidecaya. Los tres restantes son interventores del Estado. La toma de posesión de los nuevos administradores de Rumasa tuvo lugar en la séptima planta. La lectura del decreto ley de expropiación se vio interrumpida por el

anuncio de la colocación de una bomba, lo que resultó una falsa alarma. Los nuevos administradores y los directores generales de las divisiones de Rumasa abandonaron el centro de la plaza de Colón y continuaron el acto de toma de posesión en la cafetería Manila de la calle Génova.

Los administradores generales, alguno de los cuales se vio sorprendido por su designación a primeras horas de la mañana del jueves, iniciaron su actividad, en compañía de los directores generales del holding de la abeja, siguiendo ante un receptor de televisión la conferencia de prensa convocada por Miguel Boyer, ministro de Economía y Comercio.

Normalidad y cese de consejosPor la tarde, visitaron diversas dependencias centrales de Rumasa y se mantuvieron en permanente contacto con la Dirección General del Patrimonio, cuyo titular, Javier del Moral, firmó por la noche una circular que fue distribuida durante la mañana de ayer, viernes, entre las empresas del grupo de la abeja. Paralelamente, el Banco de España, que participó activamente el día anterior en la formación de una comisión de servicios para dirigir la veintena de bancos expropiados, hizo circular una nota entre todas las entidades bancarias radicadas en España, con el fin de que colaboren y no obstaculicen la normalidad del citado grupo. ."l_a expropiación por el Estado de las acciones representativas del capital de las sociedades del grupo Rumasa, SA", dice el primer punto de la circular de Javier del Moral, "no debe afectar en modo alguno al desenvolvimiento de las actividades de las empresas pertenecientes a dichas sociedades, que han de seguir realizando todas sus operaciones con absoluta normalidad". También señalaba, entre otras cosas, que la, única excepción serán los bancos (el personal de los mismos ha acudido a trabajar estos días, aunque las puertas permanecieron cerradas al público), en los cuales debe reanudarse la regularidad de. sus operaciones el próximo lunes. Para ese momento está prevista la retirada del dispositivo de seguridad establecido por el Ministerio del Interior desde la noche del miércoles en las empresas que exhiben la abeja dentro del hexágono.

En virtud de las instrucciones de la circular y de las primeras inditaciones del Gobierno, los administradores empezaron a aplicar el decreto-ley (ha quedado suspendida, por ejemplo, lajunta ordinaria de accionistas de Galerías Preciados prevista para hoy), a elaborar la lista de participaciones empresariales de Rumasa, y a comunicar el cese de todos los miembros de consejos de administración de las empresas expropiadas y de los consejeros delegados, salvo quienes tengan poderes ejecutivos por ocupar puestos de dirección.Posible impugnación

La medida ha suscitado diversos problemas en empresas donde Rumasa no tenía la mayoría absoluta. En la empresa de seguros Fénix Peninsular, una de las cuatró del grupo Sanjurjo y participada en un 50% por el holding de la abeja y en otro 50% plor el grupo francés Druot, se ha registrado una fuerte reacción. En medios próximos a los administradores sé hablaba de la posibilidad de una impugnación.

Mientras los inspectores de seguros y los interventores de Hacienda iniciaban su aterrizaje por las empresas- del grupo, técnicos del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social estudiaban la situación de los pagos por cotizaciones en cada una de las empresas de Rumasa, y algunos inspectores del Banco de España se desplazaron a los principales bancos. Los administradores generales, por su parte, estuvieron en contacto permanente con las autoridades y con la comisión de servicios encargada del trabajo más complejo: el normal funcionamiento de los dieciocho bancos. Nombrados tras consultas entre Banco de España, Fondo de Ga rantía de Depósitosy banca priva da, entre ellos figuran Francisco Ruiz Jarabo (procede del Urquijo y se ocupará de inversión), Juan Lladó (del Internacional de Co mercio, para internacional), Mar tín Oviedó Ourídico), Ignacio Bu rueta (del Vizcaya) y Carlos Ramí rez de Bergés (del Bilbao). Para concretar su actuación, estuvieron ayer reunidos representantes de los grandes bancos y del Fondo, que por la tarde organizó otras reuniones con directivos de los bancos y de las divisiones de Ru masa para concretar la relación de bancos y empresas, y el trabajo a partir del lunes. El trabajo había sido iniciado durante la mañana por los administradores generales, con el fin de fijar la lista definitiva de empresas a expropiar y cargos que permanecen. Isac, su coordinador, declaró que la normalidad queda garantizada por la ventaja adicional de la presencia del Estado.

Los administradores, asesorados por Joaquín López Ayuso, quien dimitió poco antes de las elecciones generales como director de la división bancaria de Rumasa, no han decidido sobre la permanencia de la marca de la abeja y no accedieron al ático donde trabajaba José María Ruiz Mateos. Este, según un familiar, permaneció ayer en su casa, reunido con algunos asesores.

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