Los países latinoamericanos y del Caribe deben amortizar este año cerca de 7 billones de pesetas

El Banco Mundial dio a conocer ayer en Washington las proyecciones de las amortizaciones de capital e intereses que deben pagar los países en vías de desarrollo, entre los que figuran las veinticuatro naciones latinoamericanas y del Caribe, por los compromisos contraídos en su deuda externa. Las estadísticas reflejan que, en conjunto, estas naciones deben amortizar el mayor volumen de sus compromisos a corto y medio plazo.

En el presente año, los países latinoamericanos y del Caribe deberán amortizar la cantidad de 53.172 millones de dólares (cerca de 7 billones de pesetas). Las cantidades descienden hasta 1989, en que estos países deben amortizar la cantidad de 18.605 millones de dólares.La mayor parte de las naciones con problemas de deuda exterior negocian o han llegado ya a acuerdos para aplazar los pagos de las amortizaciones de capital e intereses para 1983 y los años siguientes. Bolivia, donde la cotización del peso frente al dólar en el mercado negro disminuye día a día, va a pedir a la banca privada internacional una prórroga de dos años para reiniciar el pago de su deuda.

Numerosos bancos europeos y pequeños bancos norteamericanos han reducido el volumen de sus créditos a Brasil en las últimas semanas y se especula con la posibilidad de que este país tenga necesidad de una moratoria total de su deuda externa. Uruguay comenzará esta misma semana la renegociación de 500 millones de dólares de deuda exterior a corto plazo que vence este año. Otros países latinoamericanos atraviesan también por momentos muy delicados en su situación económica, como Venezuela, que ha decidido establecer un control parcial de cambios ligado a un mantenimiento de la paridad monetaria para la reglamentación de las operaciones exteriores. En Argentina, mientras tanto, el peso ha acelerado su permanente devaluación.

Brasil, a la cabeza

El país que mayores amortizaciones deberá satisfacer es Brasil, que en 1983 tiene que amortizar la cantidad de 15.798 millones de dólares. Por detrás se encuentra México, con 11.947 millones; Argentina, con 5.842 millones, y Venezuela, que debe satisfacer la cantidad de 3.118 millones de dólares.Las proyecciones de los pagos que ha dado a conocer el Banco Mundial, en un amplio documento de 300 páginas, están elaboradas en función de las estadísticas y datos oficiales o de otras fuentes referidos a los compromisos adquiridos por los países hasta 1981.

El Banco Mundial anunció ayer al mismo tiempo el lanzamiento de un programa de acción especial que prevé la concesión de 2.000, millones de dólares en créditos suplementarios a los países en vías de desarrollo para el período 1983-1985. Según el comunicado del Banco, estos créditos permitirán a los países en vías de desarrollo "mantener sus esfuerzos de desarrollo, a pesar de la crisis económica internacional". La entidad internacional reconoce que estos créditos no resolverán los problemas del Tercer Mundo, pero constituyen "un suplemento importante" a la ayuda concedida por otras organizaciones internacionales o por Gobiernos.

Este programa especial supone un incremento del 8% de los créditos previstos por el Banco Mundial para el período 1983-1985. El Banco considera que no existe una "crisis generalizada de endeudamiento" en los países del Tercer Mundo. Las dificultades financieras de los países en desarrollo, según su informe, no suponen "una amenaza para la estabilidad de los intermediarios financieros internacionales".