La Generalitat no descarta crear una lotería y construir un hipódromo

El Gobierno de la Generalitat estudiará la posibilidad de crear una lotería propia de la comunidad autónoma, según afirmó ayer en el Parlamento catalán el conseller de Gobernación, Macià Alavedra. Anunció también la próxima convocatoria de un concurso para construir un hipódromo en el área de Barcelona, donde se permitan las apuestas. Esta instalación es necesaria para los Juegos Olímpicos de 1992.El conseller adelantó, además, la voluntad del Gobierno de la Generalitat de poner límite al desmesurado crecimiento de salas de bingo -se han contabilizado 160 salas en toda Cataluña- y fijó en el día 30 del próximo mes de junio la fecha tope para presentar una ley que proceda a la ordenación global del juego en Cataluña.

Macià Alavedra contestó a una interpelación presentada por el diputado de Esquerra Republicana Albert Alay, quien, entre otras cuestiones, se interesaba por la posibilidad de crear un servicio catalán de loterías para aumentar los ingresos de la Generalitat. Según el artículo nueve del Estatut, la Generalitat tiene competencias exclusivas en "casinos, juegos y apuestas, con exclusión de las Apuestas Mutuas Deportivo-Benéficas" (quinielas). A este respecto, el conseller afirmó que interpretaba que la creación de una lotería propia entra dentro del abanico de posibilidades de la Generalitat, aunque mostró su temor a que se produzca una colisión de intereses con el Estado. Para compensar la pérdida de ingresos por las quinielas, Alavedra se mostró partidario de fornentar las carreras de caballos, "que en otros países tienen una importancia igual o superior a las quinielas".

El pleno del Parlament de ayer sustanció también una interpelaión socialista en relación al nombramiento del diputado en el Congreso y ex conseller de la Generalitat, Ramon Trias Fargas, como asesor del presidente de la Generalitat en materia económica, equiparado en el sueldo a un director general. El portavoz socialista Lluís Armet afirmó que ese nombramiento violaba el espíritu de una ley del Parlament que propugnaba la dedicación exclusiva de consellers, directores generales y diputados, y calificó de políticamente gravísimo que se hubiera efectuado este nombramiento el pasado mes de noviembre cuando ya se sabía que el uno de enero entraría en vigor la ley de Incompatibilidades, que le iba a áfectar directamente.

El conseller de Economía y Hacienda, Jordi Planasdernunt, contestó que las razones para nombrar a Trias asesor económico de Pujol se basaban en la conveniencia de aprovechar la experiencia acumulada por Trias al frente de la conselleria y como presidente de la parte catalana de la comisión mixta de valoraciones de los traspasos. Planasdemunt, anunció que, con fecha uno de diciembre, un día antes de que los socialistas presentaran su interpelación, Trias le envió una carta por la que renunciaba a cualquier sueldo por su asesoría, y que el pasado 10 de enero, por medio de otra carta enviada al presidente de la Generalitat, dimitía del cargo de asesor por no poder compaginarlo con su nueva responsabilidad como candidato a la alcaldía de Barcelona.