El Banco de Alicante se adjudicará en diez días al Exterior o al Bank of America a través de un concurso-subasta

El Fondo de Garantía de Depósitos en instituciones bancarias ha cursado la documentación correspondiente al Banco de Alicante y al de Levante a todos aquellos a los que se considera podrían estar interesados en su adquisición, a través del habitual mecanismo de concurso-subasta. En los próximos diez días se tomará una decisión sobre el Alicante, y a primeros de marzo le tocará el turno al de la familia Garrigues. Los actuales responsables del Banco de Descuento estiman que podrá ser adjudicado a mediados de marzo, y el de Crédito e Inversiones se pondrá en subasta a finales del próximo mes.

Cronológicamente, el Banco de Alicante será el primer adjudicado por el Fondo de Garantía de Depósitos. Las impresiones recogidas en distintos medios financieros es que la gran banca nacional no se muestra interesada en su posible adquisición y que en estos momentos dos instituciones, el Exterior de España y el Bank of America son las únicas que están preparando una oferta concreta de compra. En medios cercanos al Banco de Alicante se considera que la situación de la entidad no es excesivamente preocupante. En este sentido, se señala que el Alicante no ha tenido que solicitar dinero del Banco de España para hacer frente a sus obligaciones ni se piensa que lo vaya a tener que hacer antes de que cambie de propietario.La reducción del valor de las acciones a una peseta por acción, como se aprobará en la operación acordeón que se lleve a cabo una vez sea adjudicado, bastará, prácticamente, para asumir el nivel de pérdidas que tiene la entidad. El Banco de Alicante es un banco pequeño, con una implantación muy regional y que no se ha visto sometido a tensiones importantes, a pesar de los problemas por los que ha atravesado el grupo de Banca Catalana, al que se halla ligado.

La escasa importancia del Banco de Alicante para los planes de los grandes privados ha inclinado al Fondo de Garantía de Depósitos a invitar al concurso a las entidades que han mostrado interés en su adquisición. Tanto el Bank of America como el Banco Exterior, por diversos motivos, quieren adquirir esta entidad. Para el banco norteamericano sería una fórmula para estar presente en el mercado de captación de depósitos a precios más reducidos y ampliar su capacidad operativa de concesión de créditos en España. El Banco Exterior, por su lado, renuncia a pujar por la compra del Levante, al coincidir muy exactamente la localización de sus sucursales con las del Banco de Levante, y se inclina, por ello, por adquirir el Alicante.

El 'agujero' del Levante

A primeros de marzo se espera que el Fondo de Garantía adjudique al mejor postor el Banco de Levante, el más importante de los actualmente sacados a subasta. En un primer momento, tanto el Banco Exterior como el de Vizcaya hicieron saber su intención de estudiar la situación de esta entidad; posteriormente otros bancos se sumaron a ello. El Banco Exterior, una vez que se ha distribuido el pliego de condiciones, ha renunciado a estudiarlo, al haber mucha similitud entre la distribución geográfica de ambas entidades, lo que duplicaría su presencia en muchas zonas.El Banco de Vizcaya, por su parte, tras un período en el que pareció desistir de intentar comprarlo, lo vuelve a estudiar, aunque aún no tiene una decisión tomada. La Impresión general es que la mayoría de los grandes bancos, salvo aquellos que tienen que solucionar otros problemas más urgentes, estudiarán con cuidado las condiciones planteadas por el Fondo de Garantía para hacer una oferta en firme antes del día 21, que es cuando vence el plazo actual.

Si los problemas del Banco de Alicante son relativamente escasos, ya que es un banco pequeño, sin grave deterioro patrimonial el Levante, banco mediano con fuertes participaciones inmobiliarias y con muchas operaciones con sus propietarios y asociados, presenta un saneamiento más caro. Estimaciones que pueden considerarse fiables cifran en cerca de 30.000 millones de pesetas el valor de los activos que tendrá que quedarse el Fondo de Garantía cuando venda la entidad . El banco que presenta un peor perfil es el de Descuento, cuyo pliego de condiciones aún no ha sido distribuido, pero se hará en las próximas semanas, ya que se estima que el agujero es de unos 10.000 millones de pesetas, cuando sus depósitos apenas se situan en 8.000 millones.

En cualquiera de los tres casos, el Fondo de Garantía de Depósitos quiere que la variable fundamental de la operación descanse sobre el montante de la financiación adicional que los bancos adquirentes pidan y el plazo que soliciten para ello. Se quiere ir a una operación de finiquito, que no se revise al término de un ejercicio o cuando se haya efectuado una auditoría externa, como ha ocurrido en algunos casos anteriores, como en la adjudicación de Bankunión.