Reunión del Comecon para incrementar la cooperación energética
La cooperación energética entre los países socialistas europeos es el tema central de la sesión del Comité Ejecutivo del Comecon (Mercado Común Socialista), que comenzó ayer en Moscú, con participación de delegaciones de los diez países miembros (Bulgaria, Hungría, República Democrática Alemana, Polonia, Rumania, URSS, Checoslovaquia, Vietnam, Cuba y Mongolia) y de Yugoslavia, informa France Presse.La agencia oficial soviética Tass, esta sesión examinará los temas relacionados con la realización a largo plazo (hasta 1990) del programa de cooperación, en el campo energético, de combustibles y materias primas.
La agencia oficial soviética ha señalado que van a tomarse medidas para satisfacer mejor las exigencias de los países del Comecon en estos campos. Los delegados examinarán la posibilidad de economizar energía mediante el uso de ordenadores.
Durante los últimos años, y debido a sus propias dificultades económicas, la Unión Soviética ha recortado sus suministros de petróleo (a precios inferiores a los del mercado libre) a sus aliados europeos. Por su parte, estos países han tenido que compensar la carencia mediante programas de ahorro energético, recortes en los objetivos de expansión industrial y gravosas compras de crudo en divisas, en un período de estancamiento económico Este-Oeste y, en algunos casos, de creciente deuda exterior.
Restricciones soviéticas
Países como Rumanía, lastrado por una fuerte deuda exterior y poseedor de una gigantesca industria petroquímica infrautilizada, o Hungría, que se ve en apuros para mantener el nivel de vida, relativamente próspero, de su población, han dado muestras de malestar ante el recorte en el suministro de crudo soviético.Checoslovaquia ha recortado aún más sus importaciones de Occidente y ha iniciado un programa de austeridad destinado a ahorrar energía en la industria. Tan sólo Polonia parece no haberse resentido de las restricciones soviéticas, en opinión de expertos económicos occidentales.
La sesión del comité ejecutivo del Comecon, la número 105 en su género, es una continuación de la celebrada el pasado mes de junio en Budapest. Según los especialistas, pasará revista al programa de construcción de centrales nucleares, así como a los intercambios en el campo del gas y el petróleo y la cooperación en el sector de transportes.
En el campo nuclear, el programa de cooperación socialista prevé la construcción de dos centrales nucleares, de una potencia de 4.000 megawatios cada una, en la Unión Soviética.
En 1982 la potencia instalada de las centrales nucleares de Bulgaria, República Democrática Alemana, URSS y Checoslovaquia alcanzó, según las estadísticas soviéticas, 19.500 megawatios, con una producción anual de 110.000 millones de kilowatios / hora. La cooperación energética incluye la construcción de dos líneas de alta tensión de 750 kilovatios en la URSS y en Hungría, respectivamente. El volumen de los intercambios energéticos entre los países del Comecon ha alcanzado los 32.000 millones de kilowatios / hora en 1981.
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