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Arafat y Kreisky hablan en Mallorca sobre la paz para Oriente Próximo

Yasir Arafat, líder de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), pisó ayer suelo español para visitar al canciller austriaco, Bruno Kreisky, al que definió ante la Prensa como "un viejo amigo personal y un gran amigo de la causa palestina". A Kreisky, Abu Ammar (nombre de guerra de Arafat) le pidió, según dijo, que "no ahorrase sus esfuerzos para conseguir una paz justa y duradera en Oriente Próximo. Los planes del rey Fahd y del presidente Reagan para la región fueron discutidos por los dos políticos.

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Kreisky, un tenaz defensor de la causa de la paz

Arafat aterrizó ayer en Palma de Mallorca minutos antes de las dos de la tarde en medio de un impresionante dispositivo de seguridad que, según corresponsales locales, no tuvo ni siquiera precedentes cuando los Reyes Juan Carlos y Hassan II de Marruecos se entrevistaron en la isla la pasada primavera.Horas antes de que tomase tierra en la zona militar del aeropuerto de Son San Juan, el avión de la fuerza aérea argelina procedente de Túnez y Argel, decenas de soldados del Ejército del Aire patrullaban a lo largo de las pistas de aterrizaje mientras nerviosos guardias civiles detenían y cacheaban a todo aquel que pretendía acercarse a la base aérea.

Desde los tejados de la terminal aérea, tiradores de elite vigilaban cualquier movimiento sospechoso, como también lo harían más tarde en el periférico hotel Son Vida -cuyos accesos estaban estrictamente controlados por la policía nacional- en los alrededores del chalé del jefe del Gobierno austríaco, en la urbanización Costa d'en Blanes.

Allí llegó el máximo dirigente palestino a las cinco de la tarde acompañado, además de sus seis guardaespaldas, por Abdel Latit Abu Hijheh, jefe adjunto del departamento político (Ministerio de Asuntos Exteriores) de la OLP, Issam Sartaui, especialista palestino de la Internacional Socialista y Nabil Amrou, director de la emisora de radio La Voz de Palestina.

Kreisky, con quien Arafat se entrevista y habla, por teléfono regularmente, salió al portal y saludó efusivamente a su invitado antes de recibirle en su casa durante casi tres horas.

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El lider palestino mantuvo una conversación protocolaria con las autoridades españolas

El único contacto prolongado del presidente del Comité Ejecutivo de la OLP con las autoridades españolas había tenido lugar dos horas antes, a las tres de la tarde, cuando Arafat abandonó la suite real número 657 que ocupaba en la sexta planta del lujoso hotel-castillo Son Vida para almorzar con el gobernador, Carlos Martín Plasencia; el secretario general de la Federación Socialista Balear, Félix Pons; con Emilio Alonso, Emilio Menéndez del Valle y otros responsables del PSOE, y con Ramón Aguiló Fuster, alcalde de Palma y de origen judío. "Fue una conversación protocolaria que giró en torno al apoyo español a la causa palestina", comentó Félix Pons al final de la comida.La escasez de sus contactos oficiales no le impidió a Arafat recordar que "los socialistas españoles son solidarios con nuestra causa", y agradeció "profundamente" las numerosas atenciones que las autoridades locales tuvieron con él durante esta visita privada, que finalizó hoy de madrugada.

Para explicar la ausencia de entrevistas entre el líder palestino y -miembros del nuevo Gabinete socialista, Arafat dijo que fue "el mismo domingo cuando avisé a Kreisky de mi llegada", dando así a entender que la Administración española no tuvo tiempo d e organizar un encuentro político.

En materia de política internacional, Arafat consideró, en una conversación particular con el enviado especial de EL PAIS, que "era aún prematuro valorar la visita" del rey Hussein de Jordania a Wasinghton y prometió ser más explícito cuando se haya entrevistado nuevamente con el monarca.

El líder palestino fue más concreto cuando abordó la posible retirada de Líbano de los 8.000 fedayin palestinos que aún permanecen en la llanura de Bekaa. Al comentar su encuentro, a finales de la semana pasada, con dos emisarios del Gobierno libanés, Arafat precisó que a través de ellos había enviado un mensaje al presidente de Líbano, Amin Gemayel.

Aseguró también que la OLP "adoptará una postura más positiva ante nuestros hermanos libaneses, que compartieron nuestras dificultades y sufrimientos ante la agresión israelí".

Arafat abandonó Palma de Mallorca ayer a las 22,30 horas, con dirección a Túnez, en un aparato de la Fuerza Aérea argelina.

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