Los compromisos españoles con Latinoamérica son inferiores a los contraídos por otros países

Los riesgos financieros de España con Latinoamérica "son mucho menos graves que los contraídos por países como Francia e Italia", manifestó el presidente del Banco de Bilbao, José Angel Sánchez Asiaín en la presentación a la Prensa de Barcelona del segundo balance social del grupo bancario.Sánchez Asiaín argumentó esa afirmación señalando que en el caso español los riesgos "son soberanos en su 90'%", es decir, se trata de operaciones realizadas con países más que con empresas concretas. Estas últimas son más susceptibles de registrar problemas de solvencia.

El banquero español indicó que el clima financiero internacional ha mejorado notablemente desde la reunión de Toronto del Fondo Monetario Internacional (FMI). "Entonces, la suspensión de pagos de México originó la sensación de que el sistema financiero internacional se asentaba sobre un barril de pólvora". Posteriormente, la capacidad del FMI para aumentar las cuotas, la aceptación mexicana de las orientaciones del organismo y la actitud "positiva" de los Gobiernos que, como el de Reagan, han realizado esfuerzos como en el caso de Brasil, han despejado aquella sensación derrotista.

Este clima internacional "más sereno" proviene también de la constatación de que "los problemas de Latinoamérica son de liquidez y no de solvencia", en opinión de Sánchez Asiaín, quien apoyó esta visión en el dictamen de la comisión de expertos de la banca privada internacional presidida por el vicepresidente del Chase Manhattan Bank. En esta línea de mayor tranquilidad sobre los riesgos internacionales, en especial los referentes a países de Latinoamérica, recalcó que la Reserva Federal norteamericana ha contestado a los bancos de aquel país que no considera necesario que hagan provisiones especiales para los préstamos hacia aquellos países, e incluso ha recomendado un incremento porcentual del nivel de riesgos en algunas de esas naciones, que alcanzan el 10% de lo comprometido hasta ahora.

Esta mejoría del sistema financiero internacional, sin embargo, difícilmente se traducirá en una baja generalizada de los tipos de interés: "No parece que se pueda apostar mucho a esta baja, que sería tan necesaria para lograr que los costes financieros pudieran ser soportables para las empresas". Asiaín indicó también que en las últimas reuniones de los siete grandes se ha abordado este asunto con interés primordial, y que hay unanimidad en proponer "una acción concertada para rebajar los tipos de interés", aunque ello sea muy difícil.