En libertad provisional la joven murciana que abortó tras sufrir una violación
María del Carmen Olmo Martínez, la joven encarcelada en la prisión de Murcia, acusada de abortar el pasado sábado día 13, fue puesta ayer en libertad provisional, sin fianza, a primeras horas de la tarde. El fiscal de la Audiencia Provincial, Augusto Morales, aconsejó al juzgado de instrucción número uno, encargado de la causa, la liberación, a la vista del procedimiento por violación de la misma que se sigue en el juzgado de Orihuela.
La confirmación de la violación de Mari Carmen Olmo podría, en un futuro, exculpar parcialmente los hechos de que se le acusa, según declaró el fiscal Morales.Mari Carmen Olmo es acusada de haber interrumpido una gestación de cuatro meses, después de que el 18 de julio de este año fuese violada en las afueras de Orihuela (Alicante). Olmo había ingresado en prisión el martes día 16, junto con otras dos mujeres, I. C. M., de 52 años, con sobrenombre La churrera, es acusada de haber practicado el aborto en el pueblo de Torreagüera. La segunda, una joven amiga de Mari Carmen, calificada por la policía como de intermediaria. Ambas quedaron detenidas, después de que el titular del juzgado de primera instancia tomase declaración a Mari Carmen Olmo en la residencia de la Seguridad Social de Murcia, donde fue ingresada a causa de las grandes hemorragias que sufría, como consecuencia de la provocación de aborto, mediante un líquido jabonoso en el útero.
La policía fue quien trasladó a la joven a la ciudad sanitaria de la Seguridad Social, instruyendo las primeras diligencias, que notificó al juzgado de guardia, en el mismo hospital. EL PAIS recibió una negativa oficial de la comisaría murciana, cuando le solicitó una versión de estos hechos.
Según ha sido comunicado a sus abogados defensores -Asunción Moreno y Gonzalo Franco-, Mari Carmen Olmo hizo auto-stop el 18 de julio de 1982, desde Murcia hasta la población de Orihuela, a unos veinte kilómetros de esta ciudad, donde ese día se celebraba un festival de rock. La joven fue forzada por uno de los tres ocupantes del vehículo, a las afueras de la localidad alicantina. Según comentó la propia afectada, solamente fue uno de los tres ocupantes del coche, el que le obligó a realizar el acto sexual.
A continuación, prosigue, la depositaron en el local donde se celebraba el concierto. Ella tomó nota de la matrícula del vehículo, y denunció los hechos el 23 de julio en la comandancia de la Guardia Civil de Murcia, donde tiene su residencia. La Guardia Civil trasladó la misma al juzgado de instrucción de Orihuela, de donde fue llamada el 23 de agosto para un careo con tres hombres detenidos, que se ajustaban a la descripción de su violador y encubridores, a los que reconoció. Sin embargo, en ningún momento, Mari Carmen Olmo reconoció en esas fechas que se encontraba embarazada a causa de la violación sufrida, ya que tenía intención de interrumpir la gestación.
Los abogados defensores de la violada habían cursado ayer una petición de libertad provisional, en base al artículo 414 del Código Penal, en donde se califican los hechos probados de aborto "por causas de honor" como un delito penado con arresto mayor.
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