Sciascia: "Las libertades se pierden cuando se comienza a querer perderlas"

"La libertad de Prensa reside en la tensión que se mantenga con la Administración de justicia", afirmó en Valencia el escritor y diputado radical italiano Leonardo Sciascia en las Jornadas sobre Libertad de Expresión e Información, que organiza la Unión de Periodistas del País Valenciano.

Sciascia, diputado del Partido Radical italiano y ex parlamentario europeo, reflexionó sobre el miedo a la libertad, constatado durante el fascismo en Italia, que llevó a los profesionales de la información a recortar ellos mismos su libertad informativa sin necesidad de leyes represivas. "Bastó una vaga amenaza sobre sus cabezas para eliminar la libertad de Prensa", afirmó. "En el fascismo italiano no hubo leyes represivas sobre la libertad de Prensa. No fue necesario".Para el diputado Sciascia, "las libertades se pierden cuando se comienza a querer perderlas". Contó la anécdota de aquel personaje de una narración italiana que se pregunta al final: "¿Ahora soy libre y puedo pensar como quiera?". Pero llegó a la conclusión de que no conseguía pensar nada, y volvió (según el narrador) a ser fascista por propia decisión.

Por otro lado, Enrique Bustamante, autor del libro Los amos de la información en España, propuso una nueva línea de intervención en la infraestructura informativa española, ya que "la inmensa mayoría de la estructura actual sigue siendo la misma que existía en el franquismo".

"En este país, que en todos los mapas informativos aparece como perteneciente al mundo de la libre información, hemos penetrado, sin embargo, en las junglas de la corrupción informativa", dijo el subdirector de EL PAIS, José Luis Martín Prieto.

Martín Prieto aseguró que "de entre el panorama de los medios informativos de Occidente, nuestro caso es el más llamativo y el más preocupante en cuanto a falta de ética, abuso de la mangancia y generalización de las corruptelas. La transición hacia la democracia ha servido para muchas cosas, pero esencialmente para que los periodistas hayamos perdido el camino de nuestros valores éticos".

"Creo", añadió, "y lo lamento, que la corrupción periodística del franquismo fue cualitativamente inferior a la que estamos padeciendo con la democracia parlamentaria".

Como temas de reflexión Martín Prieto denunció la proliferación de boletines confidenciales, el fracaso del periodismo de investigación y el estancamiento de los estatutos de propiedad de los medios informativos por los profesionales.