Partidos y sindicatos exigirán la liberación de Orbegozo en una manifestación silenciosa

Las centrales sindicales Comisiones Obreras, ELA-STV y Unión General de Trabajadores, y los partidos políticos PNV, PSOE y PCE acordaron ayer, en el curso de una reunión, convocar a una manifestación silenciosa, que tendrá lugar mañana a mediodía en Zumárraga, para exigir la puesta en libertad del empresario guipuzcoano Saturnino Orbegozo, secuestrado el pasado domingo cuando salía de misa. La manifestación cubrirá el mismo recorrido que realizó el industrial antes de ser secuestrado y se detendrá, por espacio de un minuto, en la plaza de Eliz-kale, punto donde se produjeron los hechos. Los organizadores de la manifestación colocarán el mismo día, en distintos lugares de las localidades de Zumárraga y Urretxu, un total de treinta mesas de recogida de firmas solicitando la inmediata liberación de Saturnino Orbegozo.

Esta iniciativa, que pudiera ser también secundada por Euskadiko Ezkerra, dará paso a posturas de mayor envergadura en el supuesto de que el empresario guipuzcoano no sea liberado en fechas próximas.El secuestro parece que ha llevado la zozobra a los 1.400 trabajadores de la empresa Orbegozo, que temen que este hecho llegue a influir en la conservación de sus puestos de trabajo. José Francisco Urrestrilla Zubigaray, miembro del comíté de empresa, ha afirmado públicamente que el pago de un posible rescate supondrá privar a la empresa de un determinado dinero y perjudicará a los trabajadores, cuya situación es ya de por sí problemática, en un momento en que el sector siderúrgico español atraviesa una fuerte crisis. Miembros de Herri Batasuna de Zumárraga han reconocido, también que el secuestro de Orbegozo es una acción impopular.

Mientras tanto, la familia Orbegozo continúa afirmando que no ha establecido contacto con los secuestradores. La esposa del empresario, María Jesús Gaztañaga, ha sido la primera víctima de esa guerra de nervios que empieza a afectar a los miembros de la familia, y se encuentra muy deprimida, en un estado de gran excitación que le impíde además conciliar el sueño.

Algunas fuentes que citan círculos de refugiados vascos, aseguran que el secuestro es obra de ETA Político-militar VIII asamblea, organización que estaría dispuesta a exigir un total de mil millones de pesetas en concepto de rescate. La cifra, por desorbitada que parezca, encajaría sin embargo en los hábitos de ETApm VIII, quien acostumbraría a plantear elevadas cantidades como punto de partida de una negociación que finalmente se resuelve con el pago de cifras menores, incluso a la décima parte de la inicialmente exigida.

La policía no descarta en absoluto a los octavos como autores del secuestro, pero tampoco a los comandos Autónomos Anticapitalistas. El hecho de que la operación del secuestro haya sido mal realizada desde un punto de vista técnico, aunque sus autores consiguieran el objetivo, lleva a algunos cargos policiales a atribuir la acción a los comandos autónomos, cuya preparación sería mucho menor que la de los poli-milis.