Acuerdo de cuatro empresas catalanas de motocieletas para reestructurarse

Representantes de las empresas que fabrican las motos Ossa, Montesa, Bultaco y Derbi han llegado a un acuerdo industrial de principio para acometer la reconversión simultánea de las mismas. El acuerdo, auspiciado por la Consellería de Industria de la Generalitat, incluye una serie de medidas laborales, por lo que se pretende que lo suscriban también las centrales sindicales Unión General de Trabajadores (UGT) y Comisiones Obreras (CC OO) antes de trasladarlo a la Administración central, a la que se solicitan más de 3.000 millones de pesetas de ayuda por diversos conceptos. En diversas reuniones celebradas en los últimos días -la última, el viernes pasado- se ha evidenciado la oposición de CC OO a varios aspectos del pacto, por lo que posiblemente lo firmará UGT en solitario.

El acuerdo industrial -véase EL PAIS del 27 de octubre- propugna el mantenimiento de dos únicos grupos industriales (Montesa y Derbi), el traspaso de la marca Ossa al grupo Montesa y la asignación de la marca Bultaco al grupo Derbi, así como la creación de una sociedad de reconversión "que gestione los recursos concedidos por la Administración" y coordine las actividades de los dos grupos para la consecución de los objetivos previstos.El texto del acuerdo incluye objetivos que abarcan todos los campos de actuación. En el plano industrial se pretende la modernización de la maquinaria mediante unas inversiones de 1.071 millones en cuatro años; el aumento de la productividad hasta alcanzar 65 motocicletas por hombre y año en los procesos discontinuos y 120 en los procesos seriados; la gestión de compras conjunta; el intercambio de tecnología, componentes e investigación y la racionalización de gamas y productos, negociando la posible exclusividad por parte de cada grupo de la facturación de cilindradas superiores a 125 cc e inferiores a 50 cc, bajo la premisa de mantener competencia comercial en las cilindradas intermedias de 75 cc y 125 cc". El acuerdo prevé también la complementariedad y uso común de las redes comerciales. Los aspectos más complejos del plan son el laboral y la formación de los dos grupos empresariales. Se pretende una reducción pactada de las plantillas, que afectaría a 824 empleos de los actuales 1.677 puestos de trabajo, solicitándose a la Administración que aporte indemnizaciones mínimas de 700.000 pesetas, el abono de los atrasos salariales -en el caso de Ossa y Bultaco, que están en suspensión de pagos- y la aplicación del subsidio de desempleo por dieciocho meses a los que pierdan su puesto de trabajo, lo que supone un montante total de 2.009 millones de pesetas.

Las reticencias sindicales se centran en este punto. En el proyecto de acuerdo global se prevé que si la Administración aporta una ayuda inferior a la solicitada, el conjunto de compensaciones laborales "se vería reducido en el mismo porcentaje". El otro gran problema a salvar en la formación de los dos grupos es el saneamiento de las suspensas Ossa y Bultaco, cuyas marcas y activos se pasan, respectivamente, a Montesa y Derbi, esperándose purificar sus pasivos mediante la condonación de deudas por la Administración (Seguridad Social y Hacienda) y la negociación de una quita con los acreedores-proveedores. El acuerdo industrial ya pactado entre las empresas incluye finalmente la creación de una sociedad participada por los cuatro fabricantes, que coordinará la aplicación de los acuerdos industriales, y tendrá entre sus funciones el pago de las indemnizaciones. El capital de la misma se distribuirá así: Derbi, 50%; Montesa, 25%; Bultaco, 12,5 %, y Ossa, 12,5 %.

La financiación del, proyecto correría a cuenta de las empresas, mediante una aportación de capital de 233 millones, sobre todo, de la Administración, con la concesión de 1.071 millones de pesetas, 827 de los cuales serían en créditos y 214 en subvenciones, además de los 2.009 millones de atrasos salariales, seguro de desempleo e indemnizaciones y de la condonación de deudas fiscales y de Seguridad Social. Una comisión de control con presencia de todas las partes redondearía la instrumentación de los acuerdos.

La oposición de CC OO a la firma del acuerdo obedece a su consideración de que el sacrificio exigido a la parte social y al sector público es muy superior a la prevista aportación de capital de las empresas; a la falta de globalidad del proyecto, que incluye a las industrias auxiliares de Montesa y Derbi, pero no a otras independientes, y a que en caso de que la Administración coriceda menos recursos de los solicitados esta reducción repercutiría, únicamente en los trabajadores. La Federación del Metal de este sindicato considera también que anteriores proyectos individuales de viabilidad incorporaban menores costes económicos y sociales.