Pérez Llorca considera inaceptable otro retraso en las negociaciones con la Comunidad

"Un nuevo retraso en las negociaciones con la Comunidad Económica Europea sería inaceptable políticamente para España", segun afirmó ayer en Luxemburgo el ministro de Asuntos Exteriores, José Pedro Pérez-Llorca, que presidió una nueva sesión de trabajo con los ministros de los diez, en la que se llegó a algunos acuerdos parciales relacionados con la unión aduanera y los productos siderúrgicos.El ministro español dirigió un pequeño discurso a sus colegas europeos, que puede ser interpretado como su despedida, si se cumplen los pronósticos para las inmediatas elecciones generales. José Pedro Pérez-Llorca calificó las negociaciones llevadas a cabo hasta ahora de insatisfactorias, y consideró que no existía ninguna justificacion objetiva para el retraso que han sufrido. Se quejó, en concreto, de la ausencia de un documento agrícola comunitario que responda al presentado por él mismo el pasado 29 de enero, y salió al paso de una eventual negociación agrícola con Portugal, mientras que la de España continúa bloqueada, afirmando que supondría por parte de la CEE la aplicación de dos medidas y dos pesos diferentes para un mismo problema. Pérez-Llorca señaló que la Comisión estará en condiciones de elaborar el documento agrícola antes de fin de año y que, a partir de ahora, cualquier nuevo retraso es inconcebible.

El ministro español justificó su presencia en Luxemburgo, 48 horas antes de la celebración de las elecciones generales, señalando que la negociación con la CEE es "un asunto de Estado", y que la voluntd española de hacer progresar la negociación se impone por encima de cualquier otra consideración. "No queríamos", dijo Pérez-Llorca, "que pudieran utilizar un aplazamiento como una excusa para justificar el retraso".

José Pedro Pérez-Llorca afirmó que un eventual Gobierno socialista en España no cambiaría notablemente la estrategia de negociación, al menos si se examinan las propuestas socialistas, parecidas a las del Gobierno actual. En cuanto a un cambio en la actitud de Francia, señaló que no sabía "como puede operar ese dato".

Rechazó que la negociación hubiera sido llevada con "debilidad" por parte de su Gobierno, y acusó nuevamente a la CEE de no cumplir sus compromisos.