Mitterrand recibe a Kohl, nuevo canciller de la República Federal de Alemania

La continuidad de la política de buenas relaciones franco-alemanas, y la "amistad" indisoluble entre París y Bonn, fueron destacadas anoche por el presidente, François Mitterrand, y por el canciller Helmut Kohl, al finalizar su entrevista en París, en el Palacio del Eliseo.En su primer desplazamiento al extranjero, después de acceder a la cancillería, Kohl conversó durante una hora con Mitterrand, antes de cenar en el palacio presidencial. "Más que nunca, las relaciones franco-alemanas tienen que ser lo que han sido, y deben acentuarse aún", anotó Mitterrand antes de despedirse de Kohl a medianoche. Este viaje relámpago del canciller de la RFA ya fue valorado, de antemano, como un signo de que las buenas relaciones franco-alemanas no deberían cambiar de manera importante, por la sustitución de un socialdemócrata por un democristiano en la jefatura del Gobierno germano occidental.

François Mitterrand y Helmut Kohl prepararon, en su breve encuentro de anoche, la próxima cumbre franco-alemana de los próximos días 21 y 22. En esta ocasión se verá con más precisión en qué medida el "cambio de poder en la República Federal de Alemania va a alterar en los meses futuros la cooperación monetario-económico-político-diplomática de los dos países punteros de Europa occidental.

Las primeras impresiones recogidas anoche, como era de esperar, confirmarían que en el plano bilateral no será fácil cualquier tipo de modificación que afecte la importante interdependencia económica de germanos y galos. Las dos economías dependen prioritariamente la una de la otra. El aspecto monetario (ayuda del marco al franco en estos momentos no fáciles) es el que inspira alguna inquietud en la capital francesa, y sólo los hechos podrán devolver la confianza de otros tiempos no lejanos.

Otro tanto ocurrirá en el terreno diplomático. Si entre los dos países no existen motivos de roces serios habrá que ver cómo se define Bonn con respecto a Estados Unidos, la Unión Soviética (política Este-Oeste) y en el marco de la Comunidad Económica Europea. Las intenciones manifestadas por los dos interlocutores de anoche en el palacio del Elíseo son optimistas.