_
_
_
_

Aluminio Español y su filial Alúmina Aluminio presentan suspensión de pagos

La empresa Aluminio Español y su filial Alúmina Aluminio, con un pasivo exigible conjunto reconocido de 94.000 millones de pesetas, pero que puede ascender a 120.000 millones con el riesgo de cambio, decidieron ayer presentar sendas declaraciones de suspensión de pagos ante un juzgado de Lugo, donde se encuentra la sede social de ambas sociedades. De aceptarse a trámite por el juez, será la suspensión de pagos rnás importante, por el volumen del pasivo, ocurri.da en España y la primera que afecta, aunque indirectamente, a una empresa en la que participa el Estado español a través del Instituto Nacional de Industria (INI).La declaración de suspensión de pagos provocó ayer una tormenta en medios financieros madrileños, especialmente entre la banca extranjera, que tiene un riesgo contraido con las dos sociedades superior a los 40.000 millones de pesetas. Portavoces autorizados de estas instituciones expresaron su incredulidad ante el hecho de que el INI, que participa en las dos sociedades a través de la Empresa Nacional del Alumnio, SA, (ENDASA) permitiese una suspensión de pagos en unas empresas donde reconoce su control.

Curiosamente, en las dos empresas participa, a través de Aluminio de Galicia, SA (ALUGASA), el grupo estatal francés Pechiney Ugine Kuhlmann (PUK), el mayor productor de aluminio de Europa occidental. En este sentido, la suspensión de pagos afecta a dos grupos estatales de España y Francia que son fuertes prestatarios en los mercados internacionales. El efecto que la suspensión de pagos pueda tener en la calificación de ambos países en los mercados de capitales era ayer el interrogante principal en medios bancarios internacionales.

El desencadenante de la decisíón del grupo alumíníco español ha sido, precisamente, el grave enfrentamiento registrado entre los dos grupos estatales: INI, por su participación mayoritaria en ENDASA, y Pechiney, por la suya en ALUGASA. El INI mantiene desde el pasado verano una batalla. con el grupo francés sobre la reestructuración industrial y financiera de ambas empresas. Dirigentes del INI responsabilizaron ayer al grupo francés del desenlace de la situación al señalar que el primer interés de Pechiney es abandonar las sociedades sin responder de sus obligacidaes accionariales ni de los compromisos contraídos a través de ALUGASA.

Pasa a la página 45

ALUGASA puede presentar en breve suspensión de pagos tras la ejecución de un crédito internacional

Viene de la primera páginaFuentes bancarias señalan que, tras estas dos suspensiones de pagos, es previsible que ALUGASA haga lo propio en un plazo relativamente corto de tiempo, quizás antes de díez días. Esta suspensión abriría la puerta para la absorción sin coste por el INI de esta sociedad. Tanto Aluminio de Galicia, SA, como ENDASA tienen que responder, en última instancia, de un eurocrédito sindicado por importe de doscientos millones de dólares contraído con un grupo internacional que dirige el canadiense Orión Bank, ahora fusionado con el Royal Bank of Canada.

El banco agente de este crédito tiene previsto ejecutarlo (acelerarlo, en lenguaje bancario) el próximo 11 de octubre en los tribunales británicos. En algunos medios se asegura que la imposibilidad de ALUGASA para responder a su parte proporcional de responsabilidad subsidiaria, que se eleva a unos noventa millones de dólares (unos 10.000 millones de pesetas) llevará a esta empresa a declarar suspensión de pagos o, como alternativa, llegar a un acuerdo con ENDASA o el INI para el traspaso sin coste de sus acciones, con una negociación incierta sobre las garantías bancarias. El problema para ALUGASA se agrava con la proximidad del vencimiento de los intereses de otro crédito internacional de 150 millones de dólares, en el que participa el Bank of America, Citibank, Royal Bank of Canada y otros.

De cumplirse esta expectativa de suspensión, el Instituto Nacional de Industria habría tenido éxito en una estrategia que sus acreedores internacionales no dudan en calificar de "arriesgada" y, en último extremo, de "altamente costosa" para las calificaciones excepcionales que tanto el grupo industrial como el Estado español han disfrutado tradicionalmente en el mercado. Varios bancos extranjeros evaluaban ayer en unos 10.000 millones de pesetas el coste adicional que el Estado y las empresas españolas pueden estar pagando el año próximo por los recursos que necesitarán del mercado mundial de capitales.

Desenlace rápido

La decisión de presentar sus pensión de pagos en ambas sociedades se adoptó en el consejo de Administración que el grupo celebró ayer. En dicho consejo estuvieron representados todos los accionistas con el presidente de ALUGASA, Antonio Barrera de Irimo, excusando su asistencia pero enviando a dos representantes. La sociedad de mayoría francesa comunicó por escrito su aceptación de la suspensión de pagos, que fue presentada por ENDASA, accionista mayoritario con un 55%. del capital, frente al 20% de ALUGASA. Los ocho bancos españoles accionistas, que controlan el 25% restante, asintieron y, según un portavoz autorizado de uno de ellos, decidieron marginarse de la disputa.

El proceso de declaración de suspensión de pagos se vio acelerado por la presentación, en la víspera del consejo, de un ejecutivo por parte de un banco acreedor, al parecer no perteneciente al consejo, contra las dos sociedades. El importe del crédito vencido era de doscientos millones de pesetas y, según fuentes solventes, no es el único préstamo que se encuentra vencido por parte de la banca española. La presentación de este ejecutivo hizo temer al accionista mayoritario una oleada de acciones judiciales que, tarde o temprano, hubiera forzado a la suspensión.

No obstante, fuentes de ENDASA señalaron ayer que sus representantes volvieron a someter a consideración una ampliación de capital y un plan de renegociación de la deuda, así como la reestructuración industrial del grupo. Esta propuesta no había recibido, en un Consejo previo, una respuesta positiva por parte de ALUGASA. Ayer, la propuesta ni siquiera fue sometida a votación.

Los problemas del grupo Aluminio Español-Alúmina Aluminio tienen su origen inmediato en la crítica debilidad del mercado mundial de aluminio, que en los dos últimos años ha experimentado una fuerte caída (más del cien por cien) en los precios. Pero para buscar las causas originarias había que remontarse a la planificación de un proyecto y su posterior aprobación en 1973, en tiempos de Carrero Blanco. Precisamente, el grupo francés basa su posición actual en lo absurdo de la idea de fabricar aluminio en España, donde no hay bauxita ni energía barata.

Suministrador de bauxita

Pechiney, sin embargo, es el segundo suministrador de bauxita al complejo de San Ciprián, en Lugo, cuya falta de rentabilidad es la causa inmediata del problema.

El activo total del grupo es, según una nota de las dos sociedades, de 140.000 millones de pesetas y el activo exigible, de 94.000 millones. Los bancos, nacionales y extranjeros, tienen un riesgo de 75.000 millones y los proveedores, de 19.000 millones.

El capital de Aluminio Español es de 25.100 millones de pesetas. Las dos empresas dan trabajo directo a cerca de 8.000 personas.

En medios de la banca internacional se considera, sin embargo, que el pasivo exigible es algo mayor en razón a la diferencia de cambio en los créditos internacionales, que suman 350 millones de dólares. Este riesgo mayor se sitúa por estas fuentes en unos 25.000 millones de pesetas adicionales.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_