Los mexicanos acudieron con normalidad a los bancos en el primer día de apertura después de la nacionalización

La temible retirada de depósitos bancarios, esperada por el Gobierno ayer en México, fue evitada, de acuerdo a las primeras evidencias, gracias a una abrumadora campaña de difusión realizada durante el fin de semana. Al izar la bandera en la sede del Banco Nacional de México, el segundo más grande del país, el presidente, José López Portillo puso en marcha, ayer, lunes, el nuevo sistema bancario nacionalizado, suspendido a partir del primero de septiembre.Los mexicanos, que debieron esperar más de cuatro días para cobrar su salario quincenal, llegaron ayer a las sucursales bancarias con banderas, como sucedió en el residencial barrio de Coyoacan, o comentando la "patriótica decisión del presidente", como fue en el lujoso barrio de Lomas, de Chapultepec. Mayor concentración de gente se vio en los barrios populares, a causa de que cientos de miles de mexicanos se quedaron prácticamente sin dinero durante cuatro días.

En el también lujoso barrio de Polanco, una señora dijo que la nacionalización de la banca "sólo traerá beneficios para el país. Lástima que ya no tenemos la posibilidad de comprar dólares como antes", agregó.

En efecto, el nuevo director del Banco de México, Carlos Tello, había anunciado el pasado sábado pasado que los mexicanos que deseen salir del país tendrán derecho a comprar sólo 250 dólares, y a partir del próximo miércoles.

La invitación al mercado negro no pudo haber sido más generosa. Para tranquilizar a los mexicanos, nerviosos desde el informe de López Portillo, el presidente del Banco de México había anunciado que las tasas de interés para las cuentas de ahorro subirían del 4,5% al 20%. Otra de las medidas anunciadas por Carlos Tello, y que repercutirá positivamente en el bolsillo de los mexicanos, fue la decisión de reducir al 11% las tasas sobre créditos a la vivienda de interés social.

También se decidió fijar el cambio del dólar en cincuenta pesos para el dólar preferencial y en setenta pesos el ordinario. Sólo que ayer, lunes, muchos bancos se negaron a comprar dólares a turistas y funcionarios internacionales por no tener instrucciones.

Pero, para desilusión de muchos mexicanos y extranjeros residentes, se advirtió que no se volverían a admitir depósitos en dólares, con lo cual las esperanzas de quienes pensaban que algún día podrían recuperar sus dólares quedaron enterradas definitivamente el domingo último. La televisión estatal repitió constantemente las medidas anunciadas por Carlos Tello, en el sentido de infundir confianza y tranquilidad a la población.

En un programa de noticias del Canal 13 (estatal), el locutor decía: "Si usted no tiene prisa, le recomendamos no acudir a los bancos, recuerde que sólo las acciones pasaron a manos del Estado, pero no los ahorros". También los publicistas del Gobierno hicieron hincapié en que el secreto bancario se mantendría, y agregaban que con la nacionalización de la banca privada, el país estará, en el futuro, más protegido de la crisis económica mundial.

Para la Asociación de Banqueros Mexicanos la situación sí cambió, y al tiempo que denunció como "injustas e incalificadas" las acusaciones del presidente López Portillo contra la banca privada, anunció que recurrirá a los recursos legales para defender sus intereses.