Proyecto alemán para promocionar viviendas solares, que ahorran un 50% de energía

El Ministerio de Investigación alemán acaba de finalizar en Landstuhl (República Federal Alemana) un proyecto energético que ha supuesto la construcción de sesenta viviendas familiares cuya principal fuente de energía es el Sol.Las sesenta viviendas son fruto de un concurso arquitectónico internacional en el que se pedía a los participantes diferentes proyectos de casas que, además de tener una nueva estética en la construcción, aportaran soluciones energéticas basadas principalmente en el calor que ofrece el Sol.

Los nuevos edificios aprovechan la energía solar por medio de dos vías diferentes. El aprovechamiento pasivo se consigue construyendo ventanas más grandes en la cara sur de las casas y aumentando el aislamiento térmico de paredies y cristales.

El aprovechamiento activo de la energía solar se logra colocando colectores en los tejados, que calientan el agua, de modo que se consigue calefacción y agua corriente caliente gratuitas para toda la vivienda.

Con todo, las viviendas precisan también de otros tipos de energía para completar sus necesidades, pero con los colectores solares el gasto de combustible para calefacción disminuye ostensiblemente.

Para aumentar aún más las posibilidades de ahorro energético en estas nuevas viviendas, todas ellas tienen un diseño especial con el que ofrecen menos resistencia al viento, a la vez que con una disposición nueva de los árboles alrededor de la casa se la proteje aún más de los fríos invernales.

Thomas Kroetz, técnico del Instituto de Investigaciones, que ha dirigido todo el proyecto, calcula que con todas las aportaciones que se han hecho se podrá ahorrar como mínimo el 50% de la energía primaria que normalmente necesita la vivienda de una familia en la fria Alemania.

Además, con el proyecto se esperan poder continuar las investigaciones que lleven a mejorar todavía más los sistemas de ahorro energético, tendentes a la consecución del autoabastecimientode la casa familiar.

El único problema que se han encontrado los organizadores de todo el proyecto es el de hallar habitantes para las nuevas viviendas, que cuestan entre 300.000 y 500.000 marcos (dieciocho y veintidós millones de pesetas, aproximadamente) aunque esperan compradores a partir del próximo otoño.