La oposición de la izquierda impide la remodelación del Gobierno valenciano

El presidente del Consejo valenciano, el centrista Enrique Monsonís, no pudo proceder a la remodelación parcial del Gobierno regional al no acceder ayer la izquierda, por tercera vez, a secundar su propósito. El PSOE y el PCE estiman que el Consejo debe considerarse en funciones, a la espera de que se elÍja el primer presidente de la Generalidad, de acuerdo al Estatuto de Autonomía, quien procederá a formar el primer Gobierno autónomo provisional. Por tanto, según la izquierda, no cabe ahora realizar sustituciones de consejeros, tal como propone Monsonís, al objeto de bloquear la elección de presidente de la Generalidad.

El pleno del Consejo se reunió ayer en segunda convocatoria después de los incidentes de la primera convocatoria del lunes último, en la que Monsonís vetó la entrada a un consejero socialista que considera cesado. Sólo asistieron los seis consejeros de UCD, entre ellos Monsonís, mientras los cinco consejeros del PSOE y del PCE hicieron entrega a la presidencia de un escrito por el que calificaban de "totalmente ilegal la pretendida segunda convocatoria", por no ajustarse al reglamento de régimen interior del Consejo, y solicitaban a Monsonís la convocatoria de un nuevo pleno. Asimismo, estimaban que sería nulo cualquier acuerdo adoptado.Mientras UCD intenta mantener en la presidencia del Consejo a Monsonís, bloqueando la elección de presidente de la Generalidad y del Gobierno regional por parte del legislativo, la izquierda prosigue en su aplicación del calendario que establece el Estatuto de Autonomía. Después de constituida la Asamblea provisional el pasado día 2 de agosto, se va a proceder, con el voto en contra o la ausencia de UCD, a la investidura del primer presidente de la Generalidad en el transcurso de una sesión del legislativo, convocada para mañana jueves a las 13.00 horas. El candidato que puede considerarse virtual presidente de la Generalidad es el socialista Joan Lerma, secretario general del PSPV-PSOE.

José Galán, secretario general del PSPV-PCE manifestó a EL PAIS que su partido no tenía decidido todavía su apoyo a Lerma en vez de presentar, candidato propio. "Nosotros habríamos sido partidarios de retrasar la investidura -afirmó Galán- para resolver los actuales enfrentamientos, que van más allá de problemas jurídicos, mediante un entendimiento político entre los tres partidos".

Por su parte, Pilar Brabo, diputada del Grupo Mixto, ha señalado que no asistirá a la sesión por considerar "un juego floral sin sentido" la elección de presidente de la Generalidad en vísperas de unas elecciones generales. La diputada señaló a este períodico que "el colmo, en las actuales circunstancias, es convocar una asamblea para elegir al presidente de la Generalidad. Pese a que en abstracto yo prefiero un presidente socialista, desde Iuego no pienso asistir a la reunión por que no quiero contribuir con mi presencia a la celebración de esa mascarada."