El comité de Ensidesa se opone a la paralización del tren de chapa

El comité de empresa de Ensidesa, con mayoría de UGT, acordó ayer no aceptar la paralización del tren de chapa gruesa de la factoría de Ensidesa-Avilés, propuesta por la dirección de la empresa y que fue dada a conocer la semana pasada. El comunicado del comité se añadirá al expediente que obra en poder de la Delegación Provincial de Trabajo de Asturias, que será quien tendrá que tomar la decisión final. En la reunión del comité de empresa de Ensidesa, UGT se opuso a las pretensiones de la dirección, mientras que CC OO, que sufrió un fuerte revés en las últimas elecciones sindicales de esta empresa, votó a favor de la paralización.El tren de chapa gruesa de la factoría de Ensidesa en Avilés lleva cerrado desde hace algún tiempo. La dirección de la empresa anunció la semana pasada su intención de paralizar el tren el próximo lunes, día en que tendrá que incorporarse al trabajo el personal que se encuentra de vacaciones. La paralización, según comunicación de la dirección, sería durante los meses de agosto y septiembre, y basaba esta petición en la recesión del mercado, que se ha visto acentuada por la polémica que en estos momentos enfrenta al Mercado Común con Estados Unidos en lo referente a la producción de chapa, cuyos pedidos han disminuido considerablemente.

Los representantes de CC OO en el comité de empresa, en la reunión de ayer -convocada para analizar las pretensiones de la dirección- secundaron la postura empresarial, alegando que el cierre temporal del tren de chapa no supondría la pérdida de ningún puesto de trabajo. Según CC OO, la paralización del tren es una salida válida, aunque este sindicado critica, en unos términos muy duros, la indecisión del Gobierno sobre las nuevas inversiones en el sector siderúrgico.

UGT, junto con la Corriente de Izquierdas y los independientes que integran el comité de empresa de Ensidesa, rechazaron la petición de la dirección, ya que, según ellos, la salida a la crisis del sector no pasa por el cierre de instalaciones, sino por una política global que impida la paralización de las mismas. Además, UGT piensa que no se puede acceder a cerrar unas instalaciones como el tren de chapa de Avilés sin tener otras alternativas de cambio.

Las centrales sindicales con implatación en Ensidesa convocarán asambleas la próxima semana, en cuanto se reintegren los trabajadores que se encuentran de vacaciones, para informar a los mismos de la situación actual de la empresa, que no sólo tiene que solucionar el problema del posible cierre del horno de chapa gruesa de la factoría de Avilés, sino que también tendrá que abordar la situación planteada en el horno alto de La Felguera, que lleva seis meses parado y que, según la empresa, no se volverá a abrir, al igual que las baterías de cok de la misma factoría, que no serán reconstruidas.