Frente a Iberia
El día 18 de julio del presente tenía el billete de Iberia, Vuelo 403, don destino a Tenerife, y la hora de salida: 13.45 horas, del aeropuerto de Barajas. De acuerdo con las instrucciones de esa compañía, me presenté en el aeropuerto, con mi mujer y mi hija, que también viajaban, una hora antes de la hora oficial de salida.En la sala de espera reservada a los pasajeros de primera clase estuvimos hasta las 16.20 horas, hora en que fue, anunciada la salida para Tenerife, es decir, la espera fue de 2.35 horas. En este intervalo de tiempo pregunté, dándome a conocer, a una de las señoritas azafatas, a qué se debían los retrasos, contestándome que no lo sabía; le rogué que me pusiera en contacto con alguien responsable de la compañía que estuviera en el aeropuerto, con el fin de saber la hora exacta de la salida del avión, y me contestó que lo único que podría hacer era ponerme en contacto, creó recordar, con el supervisor de pasajeros. Este señor me dijo que la demora se debía a que estaban "revisando los frenos".
Todo lo anteriormente expuesto supone una falta de atención al público que utiliza los servicios de esa compañía, pagando religiosamente su pasaje; y cumple con las instrucciones de Iberia.
Por fin, a las 16.20 horas, anunciaron la salida, y cuando ya habían pasado todos los pasajeros por el control deja puerta número, ocho estuvimos esperando unos diez minutos que se abriera la puerta de cristales que comunica con el acceso al avión.
Me atrevo a asegurar que estos detalles desprestigian a nuestra compañía de bandera y supone un desprecio absoluto al pueblo español que utiliza sus servicios. /
Teniente general del Ejército, diplomado de EM de los EE de Tierra y Aire.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.