_
_
_
_
_

Estallan más de 20 artefactos en edificios públicos del País Vasco

Una veintena de artefactos explosionaron ayer en edificios públicos de las tres capitales vascas y de Pamplona, entre las once horas y la medianoche. Las bombas afectaron a unos quince edificios, entre ellos la Comandancia de Marina y la delegación de la agencia Efe en San Sebastián. Los estallidos provocaron destrozos en general de poca consideración, pero no causaron víctimas humanas, ya que los edificios objeto de los atentados se encontraban vacíos cuando estallaron las bombas. La autoría de estas acciones se atribuye, en principio, a ETA Político-militar.Las explosiones se sucedieron en breves intervalos y causaron una gran inquietud en las cuatro ciudades, en muchos de cuyos barrios pudieron escucharse. Asimismo entraron en alerta las dotaciones de policía y los servicios sanitarios de urgencia. El gobernador civil de Guipuzcoa, Pedro Arístegui, declaró a Efe que estos atentados no pasaban de "tener un carácter testimonial", y especificó que no hubo que lamentar ninguna desgracia personal y que los daños en todos los casos eran de poca consideración.

Pasa a la página 11

San Sebastián, la ciudad más afectada por las bombas que estallaron anoche

Viene de la primera página

La ciudad más afectada por las explosiones registradas ayer en el País Vasco y Navarra fue San Sebastián, donde estallaron siete artefactos. Además de los lugares citados, quedaron afectadas las delegaciones de los ministerios de Hacienda e Industria, el Palacio de Justicia, el Tribunal Tutelar de Menores de la calle Prim y el Instituto Nacional de la Salud. Concretamente, la bomba colocada en la agencia Efe contenía 1,5 kilos de explosivo y estalló en la puerta de entrada.

No se recibieron preavisos, al parecer, salvo en San Sebastián, donde fuentes de la Asociación de Ayuda en Carretera indicaron a Europa Press que sobre las 11.30 de la noche una llamada telefónica anónima anunció las explosiones y aconsejó que se acordonaran las zonas donde iban a producirse. También se cree que fueron avisados los bomberos y la Policía Municipal, pero siempre con poca antelación. Los artefactos explosionaron en la capital donostiarra a partir de la medianoche y con escasos minutos de intervalo.

Según el gobernador de Guipúzcoa, en ningún caso se empleó más de medio kilo de explosivo, y según las noticias disponibles esta madrugada, no se utilizó Goma 2, sino trilita. Concretamente, en el Palacio de Justicia la bomba estaba en un paquete de cigarrillos, por lo que no contenía más de doscientos gramos de explosivo.

En Bilbao estallaron bombas, a las 11.15 horas, en el edificio de las Magistraturas de Vizcaya, en la plaza Bomero Echaniz, donde explotaron con intervalos de pocos minutos dos artefactos en los ascensores, que afectaron a las plantas superiores. A las 10.50 horas estallaron dos bombas en las plantas baja y cuarta del Instituto Nacional de la Salud, situado en el número 62 de la Gran Vía.

Finalmente, un quinto artefacto hizo explosión en la cuarta planta de la antigua sede de la AISS, en el número 50 de la misma Gran Vía. Es de resaltar que, salvo en el caso del Insalud, las bombas de Bilbao fueron colocadas siempre en plantas altas.

Cuatro explosiones en Pamplona

Las cuatro explosiones de Pamplona, producidas entre las 11.15 y las 12.15 horas de la noche, afectaron a la delegación de Trabajo, en la calle Monasterio de Cilveti; la delegación de Cultura, en la calle Carlos III, y en dos locales próximos al Gobierno Civil: La Librería Universitaria, situada en la Avenida de la Baja Navarra, a cincuenta metros del edificio del Gobierno Civil, y el Instituto Provincial de Sanidad, en la calle Leyre, a unos 150 metros del mismo edificio oficial. Los destrozos no fueron importantes, salvo en la librería, donde se produjo un incendio que hubo de ser sofocado por los bomberos.

Sólo dos edificios fueron afectados en Vitoria. En la sede de la antigua AISS explosionaron tres artefactos, repartidos entre dos ascensores, que causaron destrozos graves en las instalaciones interiores del edificio. Las otras dos bombas estallaron en el Instituto Nacional de la Salud, en la caseta de maquinaria de los ascensores, y destruyeron un alero de la fachada y parte del tejado.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_