Movilización de trabajadores de los astilleros Cantábrico y Riera

Grupos de trabajadores de Astilleros del Cantábrico y Riera han reanudado su plan de movilizaciones espectaculares en las calles de Gijón después de haber dado, sin éxito, una tregua de dos semanas a los empresarios para cobrar los salarios que éstos les adeudan e iniciar algún tipo de replanteamiento de la sociedad, actualmente en suspensión de pagos.Los trabajadores volcaron un coche, incendiaron cubiertas de camiones y produjeron, con detergentes, grandes cantidades de espuma en las fuentes de dos plazas céntricas.

Una delegación de las centrales sindicales y de los empresarios de los astilleros de la bahía gijonesa se reunirá hoy, en Oviedo, con representantes del Gobierno autonómico asturiano para tratar de encontrar alguna solución global que garantice la supervivencia de este subsector en Asturias.

Después de varios intentos, no se ha llegado todavía a un acuerdo para fusionar los cuatro astilleros de Gijón (tres privados y uno público). Los propietarios de Marítima del Musel, Duro Felguera y Cantábrica y Riera y el Instituto Nacional de Industria (Constructora Gijonesa) mantienen discrepancias sobre la responsabilidad que habría de asumir cada astillero en la nueva sociedad resultante de la fusión.

Los retrasos en adoptar alguna decisión al respecto han provocado ya la suspensión de pagos de Cantábrico y Riera, y amenazan con el cierre de los astilleros privados a medio plazo.

El Instituto Nacional de Industria intentó inicialmente deshacerse de Constructora Gijonesa vendiendo su activo a los privados, pero éstos respondieron que también ellos están dispuestos a venderle los suyos; las diferencias residen actualmente en la participación que habría de asumir la sociedad resultante de la fusión de estos astilleros.

En la bahía gijonesa se mantienen cuatro astilleros, del grupo de los pequeños y medianos, con una plantilla total de 3.400 trabajadores. En el curso de este mes habrán de presentar sus planes de reconversión para acogerse a los beneficios de la reestructuración del sector. Existe la creencia generalizada entre los expertos de que un tratamiento aislado acabaría con el cierre de todos ellos y que su única salida es la fusión para lograr una unidad competitiva.