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Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

Homenaje a las banderas

En relación con la crónica aparecida en ese diario sobre el acto de homenaje a la bandera constitu.cional española, me permito observarle que no se ha dado relevancia alguna a la participación en el mismo de las que pueden ser consideradas más antiguas banderas militares de España. Me refiero a los pendones de las ciudades y villas de Aragón y Soria, portadas por los concejales síndicos que formaron en el centro de la plaza del Pilar.Todas ellas tienen su origen en la Edad Media, y fueron enseña de las milicias concejiles que tomaron parte en la Reconquista. Entre otras, estaban presentes las de San Juan de Plan, Jaca, Huesca y Tauste, que entraron en Zaragoza con Alfonso el Batallador. Las de Fraga, Alcañiz, Calatayud, Teruel y Daroca, que tomaron Valencia con Jaime I el Conquistador. Otras se han distinguido en guerras más recientes, como la de la Independencia. Tan es el caso de Epila y Borja.

Las prisas de los organizadores del acto y errores de coordinación impidieron dar a conocer a los medios de difusión estos y otros detalles, a la vez históricos y entrañables. Tal es el caso de Daroca, que presentó dos pendones en la plaza del Pilar, privilegio concedido precisamente en la reconquista de Valencia, al quedar partido su pendón original en un encarnizado combate contra los musulmanes. O la antaño belicosa ciudad de Alcañiz, cuya milicia tomó parte en las conquistas de Córcega y Cerdeña, e intervino en los sitios de Tortosa, Monzón, Fraga y Fabara, sin contar su permanente lucha contra los privilegios de la Orden de calatrava que le amenazaban.

El fundador de la actual dinastía, real, Felipe V, además de crear un ejército (regular) real, abolió milicias y estandartes de las ciudades y villas que habían tomado partido por el archiduque Carlos, pero en la guerra de la Independencia todas volvieron a levantarse, esta vez contra el invasor francés, sumando páginas de glorioso heroísmo. Sirvan estas líneas para reparar el desamparo con que quedaron en la plaza del Pilar y bajo la lluvia estas enseñas que forman parte de nuestra historia y pudieron confundirse con estandartes de casas regionales. /

. Alcalde de Zaragoza.

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