La calle es el escenario principal del Festival de Teatro de Palma
Els Comediants dominaron durante los tres primeros días del certamen
Tres funciones en días consecutivos han completado la presencia del grupo de teatro catalán Els Comediants, que finalizaron el domingo su aportación al Il Festival de Teatro de Palma de Mallorca, tras una demostración total de lo que es el teatro de participación, forma anticonvencional de expresión dramático-festiva, de la que ninguno de los asistentes pudo escapar.
L'Apoteosic Sarau es una obra creada y montada por Els Comediants, en la más tradicional línea de los "cómicos de pueblo", adornada y plagada de múltiples recursos, resueltos a la perfección, en dos actos de hora y media cada uno, para la que se requiere preparación, conocimientos, dotes a raudales y sobre todo ingenio, cua lidad esta que domina la generalidad de los grupos cómicos catala nes, de quienes el exponente más difundido es Els Comediants.La primera sorpresa para el es pectador es que la representación se inicia en las mismas puertas del local, en este caso, el Auditorium palmesano. El público es recibido y acompañado, por bufones y inú sicos, hasta el propio escenario que en esta ocasión se vuelve del revés. Los decorados, situados en la línea del telón, cierran el patio de butacas, quedando así los espectadores acompañados en el proscenio y sin posibilidad de es caparse de él.
En las dos partes en que se divi de L'Apoteosic sarau de Totil I To cat de l'ala, las más de veinte per sonas que forman el cuadro de la compañía proponen, en una cadencia interminable de broma y jolgorio casi callejero, numerosos juegos al sorprendido y animoso espectador, que no duda en tomar parte.
Entre chocantes sorpresas y apariciones -el ángel salvador de la princesa, amenazada por el dragón; los vagabundos que se encuentran en la noche, en lo alto de una escalera; la represión policial en pleno concierto de rock, y las leyes republicanas emanadas del rey "Tonto l"- va culminando la "verbena", para llegar a un final en el que, acompañados por un trovador casi napolitano, nos marchamos de puntillas.
Anteayer, día 17, inició su turno de representaciones el grupo gallego de Luis Seoane, que escenifica, durante otros tres días, la obra de Ramón Otero Pedrayo A casa das tres luas, bajo la dirección de Manuel Lourenzo.
Salpicando el Festival con actuaciones en calles y plazas, los grupos mallorquines S'Estornell y Voltes Triptrup han venido representando montajes de.marionetas y pasacalles músico-dram áticos. Pomme d'api, por su parte, repuso en la sala Mozart del Auditórium su espectáculo infantil Las mil y una noches.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.