Tres nuevos atentados horas antes de que concluya el plazo del ultimátum de ETAm

Un muerto y dos heridos de diversa consideración es el balance de varias acciones terroristas que se produjeron en la madrugada de ayer en el País Vasco y en Barcelona, cuando está a punto de expirar el plazo, que se cumple el domingo, dado por ETA Militar a las fuerzas de seguridad del Estado para que abandonen Euskadi. En Eibar fue asesinado el taxista Antonio Huegun Aguirre, de 43 años de edad. Su cadáver fue encontrado a primera hora de la mañana del viernes en un camino cercano a la localidad, con cinco impactos de bala. El guardia civil José Moya Mateo, de 27 años, resultó herido de gravedad al ser ametrallado por un grupo de desconocidos el cuartelillo del Cuerpo en la localidad alavesa de Villarreal.

A primeras horas de esta madrugada, unos desconocidos ametrallaron la casa-cuartel de la Guardia Civil en la localidad guipuzcoana de Oñate, sin que se produjeran heridos. El guardia de puesto repelió el ataque, perpetrado por personas que iban a pie.En Barcelona, un policía nacional resultó levemente herido por disparos de un desconocido, cuando intentaba detener a otro individuo, cerca de las instalaciones de FECSA en el Paralelo.

Coincidiendo con estas nuevas acciones terroristas, el portavoz del Gobierno, Ignacio Aguirre, declaró ayer, al término del Consejo de Ministros, que los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado han recibido la orden de permanecer en estado de alerta, en previsión de nuevos atentados.

En este ambiente de tensión, la policía francesa informó ayer de la desaparición de cuatro presuntos etarras confinados en la localidad de Antoinne, al oeste del país, durante la noche del jueves al viernes último, aprovechando los preparativos del traslado del que iban a ser objeto, a la localidad de Perigueux. Se trata de los presuntos miembros de ETA Militar, Tomas Linaza y Miguel Angel Aldana y de dos presuntos poli-milis, Juan Miguel Arrugaeta y José Antonio Atxega, que permanecían confinados en el país vecino desde el 9 de enero pasado. El Gobierno español había solicitado la extradición de los cuatro, petición que fue denegada por el Gobierno francés, pese al informe favorable emitido por los tribunales franceses.El ministro español de Asuntos Exteriores, José Pedro Pérez-Llorca, convocó a última hora de la tarde de ayer al embajador francés para transmitirle una dura nota de protesta por la forma inadecuada en que han sido vigilados los cuatro presuntos etarras fugados.

Por último, la policía francesa ha detenido a tres presuntos miembros de ETAp1n en la localidad de Dax, en las Landas. Dos de las tres personas detenidas son Aurora Fombellida y Ana María Gutiérrez, de 46 y 24 años de edad, respectivamente, esposa e hija de José Luis Gutiérrez, detenido por la policía española en la operación en la que fue liberado el doctor Iglesias Puga.

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