El Parlamento holandés exhorta a España firmar el Tratado de No Proliferación Nuclear tras el ingreso en la OTAN
Los Estados Generales de los Países Bajos (Congreso de los Diputados), aprobaron ayer la ratificación del protocolo de adhesión de España a la Alianza Atlántica, por 97 votos a favor y 53 en contra; es decir, pese a la oposición de todos los partidos de izquierda. El Congreso aprobó también sendas mociones para que, una vez producida la integración de España en la OTAN, el Gobierno de Madrid firme el Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares y para que, a su vez, el Gobierno de La Haya promueva un rápido ingreso de España en la Comunidad Económica Europea (CEE).
El largo debate se centró, fundamentalmente, en los resquemores de todas las fuerzas políticas holandesas ante el hecho de que España no haya ratificado aún el Tratado de No Proliferación de Armas Nucleares, por el que se comprometería a emplear la energía atómica únicamente con fines pacíficos y a no fabricar, en consecuencia, ningún tipo de armamento nuclear. El ministro de Asuntos Exteriores, el socialista Max van der Stoel (que defendió en todo momento la postura del Gobierno, en contra de la de su propio partido) intentó disipar las dudas asegurando que poseía elementos de juicio según los cuales el Gobierno español realizará, después de producirse la adhesión a la OTAN, una declaración anunciando su intención de firmar dicho tratado.Los parlamentarios holandeses se mostraron ampliamente preocupados ante la eventual capacidad española de fabricar armas nucleares, pero no ante la posibilidad de que albergue algún día armamento norteamericano del mismo tipo. Una moción del Partido Socialista Pacifista (PSP), para que el Gobierno holandés opusiera resistencia a la instalación de misiles atómicos en España, fue rechazada exactamente por la misma mayoría de 97 contra 53 votos.
El ministro de Asuntos Exteriores tuvo que responder a un gran número de preguntas sobre la actual situación política en España. Aseguró que la integración en la OTAN ayudará a reforzar el sistema democrático y lamentó que la adhesión a la Alianza Atlántica no se haya producido tras el ingreso en la CEE, como hubiera sido el deseo de todas las fuerzas políticas españolas. Van der Stoel afirmó que existían grandes problemas técnicos para el ingreso de España en el Mercado Común, mientras que para la adhesión a la OTAN bastaba una decisión política. "Los problemas técnicos", dijo, "se discutirán después".
Pregunta sobre supuestas armas atómicas en Gibraltar
Algunos diputados quisieron saber si la base británica de Gibraltar alberga armamento nuclear, pero el ministro de Asuntos Exteriores eludió la respuesta. Tampoco quiso contestar si la OTAN estaría interesada en el traslado de una división del Ejército español a Europa central, ni cuál sería la solución más adecuada para el problema del mando en Gibraltar. "Son temas que serán estudiados después de la adhesión de España", dijo Van der Stoel, que se comprometió a mantener a la Cámara informada sobre el contenido de dichas negociaciones.La contradicción existente entre la posición del ministro de Asuntos Exteriores y las resoluciones del congreso de su partido, contrario a la ampliación de la Alianza Atlántica, no ponen en peligro la continuidad de Van der Stoel en el Gabinete, según manifestó un portavoz del PVDA. "El partido no piensa enviar a la Armada contra el Ministerio de Asuntos Exteriores", ironizó el portavoz.
A la espera de que el proceso de ratificación del protocolo español sea cumplimentado por los escasos países que aún no lo han hecho (Grecia entre ellos), los responsables de la Alianza Atlántica han iniciado ya los preparativos para acoger a la futura delegación española. En el cuartel general de Evere (sede política) se está procediendo a la instalación de un nuevo mástil en el que ondeará la bandera española y el servicio de intendencia busca ya los despachos que pueden quedar libres.
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