La Asamblea de Cantabria se reserva la capacidad de destituir a sus miembros
La Asamblea Regional de Cantabria aprobó ayer, por veintiún votos a favor y doce en contra, la resolución presentada por el Partido Socialista de Cantabria (PSC-PSOE), según la cual será la propia Cámara autónoma la que estableza los motivos y circunstancias que determinen la pérdida de la condición de diputado regional.Isaac Aja Muela, presidente de la Asamblea Regional e integrante del grupo centrista independiente, levantó la sesión tras manifestar que el acuerdo adoptado suponía la resolución de la amenaza de pérdida del escaño de diputado regional para los ocho disidentes centristas expulsados del partido, entre los que él se cuenta, así como el desbloqueo de las instituciones autonómicas.
La propuesta contó con el apoyo de los representantes del Partido Regionalista de Cantabria (PRC), del Partido Acción Democrática (PAD) y de los centristas independientes, integrados en el grupo mixto. El texto del acuerdo, tras constatar que el estatuto de autonomía de Cantabria no contempla los motivos de cese para aquellos miembros de la asamblea que accedieron a ésta en su condición de diputados provinciales, propone que sea la propia Cámara regional la que fije esas circunstancias en el reglamento interior, cuya redacción se inició en la tarde de ayer por la comisión designada al efecto.
El grupo centrista se opuso a la aprobación de la resolución socialista por estimar que debía aplicarse, en el caso de los diputados expulsados de su partido, las fórmulas de cese y sustitución que están recogidas en el la legislación de elecciones locales. Este criterio es el que el partido centrista en Cantabria ha pretendido aplicar con la notificación realizada a los ayuntamientos a los que pertenecen los ocho disidentes, al objeto de que se procediese a su sustitución como concejales y, posteriormente, como diputados regionales.
Una vía de actuación que, aún en el caso de que se siguiera en el ámbito municipal -el Ayuntamiento de San Vicente de la Barquera, del que es alcalde Aja Muela, ya se ha negado a ello-, no tendría consecuencias para la permanencia en sus cargos de diputados regionales de los expulsados, según la resolución aprobada por la Asamblea Regional.
