La Federación de Automovilismo insiste en organizar el Gran Premio de España
La Federación Española de Automovilismo (FEA) no quiere tirar la toalla en la organización del Gran Premio de España de Fórmula 1. Después de haber pagado más de diecisiete millones de pesetas a fondo perdido para que la carrera fuera incluida en el calendario, y como réplica a lo publicado por EL PAIS (ver edición del pasado día 25 de marzo), la FEA insiste en que la organización aún es posible. El tener que pagar todavía mas de doscientos millones de pesetas para que la prueba pueda disputarse, sin una contrapartida de ingresos que compense ni siquiera la mitad de esa cifra, y el tener que realizar unas obras en un tiempo ya materialmente inexistente, no parecen suficientes argumentos para que el equipo de Sandro Rocci se rinda a la evidencia.La única modificación con respecto a la situación precedente, producida en los últimos días, ha sido la recepción en la Federación Española de un télex de la Internacional en el que se anuncia de forma oficial -aunque un télex no pueda ser considerado como documento oficial- la inclusión en el calendario del Gran Premio de España de Fórmula 1. Modificación no sustancial porque, aunque no de forma oficial, sino oficiosa, la prueba española estaba ya incluida en el calendario desde hace bastante tiempo.
Para ello, la FEA había tenido que pagar más de diecisiete millones de pesetas a fondo perdido, que no recuperará aunque después tenga que renunciar a la organización por falta de recursos, económicos. Una cantidad que estaba conceptuada por Bernie Ecclestone, el hombre que controla el circo de la Fórmula 1, como una deuda pendiente del organizador espanol, el RACE, aunque éste, con recibos en su poder, dice estar en condiciones de demostrar la inexistencia de dicha deuda.
Sea como fuere, la oficialidad en la inclusión en el calendario del Mundial no altera la situación real del Gran Premio de España de Fórmula 1. Para poder llevar a cabo la carrera, la FEA tiene que hacer unas obras en el circuito del Jarama, cuyo importe es de unos cien millones de pesetas. Conseguir el apoyo económico para cubrir esta cantidad es una empresa tan difícil para la Federación Española como hacer que dichas obras, que modifican sustancialmente el circuito, puedan terminarse antes de mayo, cuando empiece la actividad internacional del Jarama. La fecha del pasado día 1 de marzo, posteriormente retrasada al 10 del mismo mes, fue considerada por la FEA y el RACE como límite para comenzar las obras y poder terminarlas a tiempo. Ha pasado casi un mes.
Aunque la FEA siga públicamente alimentando esperanzas, a las cifras anteriores tendría que añadir los cien millones de pesetas que supone la organización de la carrera. Unos 220 millones de pesetas de gastos, para ingresar, en el mejor de los casos, una cantidad que no llegaría a cien millones, según cálculos objetivos realizados por expertos.
