Los empresarios piden a Reagan que modifique su política económica

La gran patronal industrial norteamericana ha urgido al presidente Reagan que introduzca serios cambios en su política económica a menos que el ejecutivo estadounidense "persiga el hundimiento de la economía" del país, vía una recesión más aguda y una nueva escalada de los tipos de interés.Un año después de prestarle todo su apoyo, a su llegada a la Casa Blanca, los líderes industriales norteamericanos, englobados en la organización Roundtable, manifestaron su desilusión con el programa económico de Reagan y advirtieron que sólo un cambio radical en el mismo puede enderezar la situación económica.

La principal preocupación del grupo, que encabeza el presidente de la Exxon, Clifton Garvin, se refiere al gigantesco déficit público, que no podrá ser reducido por una política de reducción de impuestos y de incremento paralelo de los gastos de defensa.

Otra de las quejas de los líderes industriales norteamericanos es el fuerte incremento de los tipos de interés. En su opinión, el mantenimiento de la misma política monetaria impedirá una pronta.salida de la crisis y la recesión, ya que el dinero disponible para inversiones será insuficiente o muy caro.

Para remediar esta situación de altos tipos y fuerte déficit presupuestario, los líderes industriales norteamericanos proponen, entre otras cosas, una medida desacostumbrada para sus principios anteriores: un fuerte corte a los gastos en defensa con el fin de evitar que la financiación del déficit presupuestario acabe con los escasos recursos del sistema.

A la vez, los empresarios norteamericanos piden que Reagan abandone su programa de fuertes reducciones fiscales para individuos, en otra acción simultánea encaminada a restablecer el equilibrio presupuestario.

El llamamiento formal de la organización empresarial norteamericana al presidente Reagan ha sorprendido a la propia Casa Blanca.

Hasta la fecha, el presidente Reagan había defendido su política económica sobre la base de que contaba con el apoyo de la comunidad económica y financiera del país. El llamamiento de los empresarios deja en mala situación a Reagan y a los defensores de su programa económico.