El despido voluntario de cien empleados mantiene la esperanza sobre el futuro de 'The Times'

Los trabajadores de la sección de administración y secretaría de Times Newspapers votaron ayer a favor del rechazo de los 210 despidos forzosos -con dos semanas de preaviso- que había decidido el lunes el propietario, Rupert Murdoch. Los portavoces sindicales señalaron que estaban dispuestos a resolver los problemas de la empresa por la vía de la negociación, y no de la imposición, aunque indicaron preferir forzar el cierre de The Times y The Sunday Times antes de ceder ante el chantaje de la dirección.Las esperanzas para salvar a estas prestigiosas publicaciones renacieron la víspera, cuando Murdoch acordó con los sindicatos el despido voluntario de cien empleados. Murdoch aceptó también la posibilidad de que los 210 despedidos fueran reemplazados por voluntarios que se mostraran dispuestos a abandonar la empresa. Murdoch se negó, sin embargo, a retirar las cartas de despido que ayer comenzaron a recibir algunos trabajadores, y no ha renunciado al eventual despido forzoso de seiscientos empleados de plantilla y novecientos que trabajan allí esporádicamente.

"Soy optimista en cuanto al futuro", indicó Murdoch, "pero esto no significa que el futuro de ambos periódicos esté asegurado". Con su actitud, Murdoch ha dado signos de que quiere salvar las publicaciones, que vienen a perder unos doscientos millones de pesetas al mes, y ha pospuesto por tercera vez en una semana su amenaza de cierre inmediato.

Murdoch ha ampliado por el momento el período de despidos voluntarios, que en principio se cerro el jueves pasado. Los que voluntariamente renuncien a sus puestos de trabajo en Times Newspapers recibirán una compensación de un mes de salario por cada año trabajado en la empresa, hasta un máximo de cinco millones de pesetas. Con el cierre, los empleados perderían esta compensación, exceptuando a los periodistas, que se rigen por un estatuto especial.