El 'no' de Formentera

El anteproyecto de Estatuto de Autonomía de las Baleares, presentado al Congreso de los Diputados el pasado mes de diciembre para su tramitación, comenzó a fraguarse en 1977 a través de la denominada comisión de los once, en la que estaban representadas todas las fuerzas políticas del archipiélago, y fue aprobado el 7 de diciembre del pasado año por una asamblea mixta de consejeros y parlamentarios del Consejo General Interinsular.Cuando el pronunciamiento favorable de los municipios baleares se encontraba en fase muy avanzada, el pasado mes de septiembre, el Ayuntamiento de Formentera -el único de la isla-, al frente del cual figuraba un alcalde de UCD, se pronunció en contra, al romper los concejales centristas la disciplina de voto y aliarse con los de Alianza Popular. A partir de este momento, los hombres de Abel Matutes consideran que la autonomía es inviable, por entender que la totalidad de los municiplos de la isla, que representa a toda la población, se pronunció en contra.

Sin embargo, en opinión de los expertos, la isla de Formentera no constituye una isla en sentido admlnl strativo, que es al que se refiere el artículo 143 de la Constitución, sino que está englobada en el Consejo de Ibiza-Formentera, y no puede acogerse al concepto de territorio geográfico independiente.