Ejecutivos de Enpetrol no testifican sobre la tragedia de Los Alfaques

Con la renuncia de los abogados de Enpetrol al interrogatorio de sus testigos finalizó, a media mañana de ayer, la fase de prueba en el juicio oral de Los Alfaques. Las partes presentarán hoy a la Sala de la Audiencia de Tarragona sus conclusiones definitivas, realizándose a continuación los informes del fiscal, la acusación popular y las defensas de los procesados. Está previsto que las sesiones del juicio, prolongadas desde el pasado lunes, finalicen hoy.

La ausencia de los testigos propuestos por Enpetrol, unida a la inasistencia de tres cuadros directivos de la factoría, en la sesión de anteayer, ha impuesto silencio sobre importantes aspectos del debate. Entre los testigos que no prestaron declaración se encuentra el jefe de personal de Enpetrol, bajo cuyas órdenes se encontraba el técnico de seguridad de la planta de Tarragona, procesado en la causa. Tampoco acudieron a su cita ante la Audiencia el jefe y el subjefe de la refinería, así como el representante de la compañía constructora del cargador, Carlos Dols. Este último, sin embargo, declaró ante el tribunal el pasado martes, en calidad de perito propuesto por Enpetrol. Los abogados del Estado, representantes de la factoría, renunciaron a su prueba testifical considerando que, a su entender, los hechos han quedado demostrados de forma suficiente.Las declaraciones de los últimos testigos de ayer -todos ellos empleados del departamento de seguridad- afirmaron que las funciones de vigilancia son competencia de la línea de producción. Este es el criterio de seguridad integrada por el que se rige la factoría, según manifestaron los testigos.

En la sesión de hoy, la acusación popular modificará sus conclusiones provisionales, en las que imputaba a los seis procesados la comisión de un delito de imprudencia. Las modificaciones de la acusación popular diferenciarán probablemente las responsabilidades que puedan corresponder a cada uno de los procesados.

El abogado de la acusación popular, Rafael Nadal, manifestó ayer a este diario que la calificación jurídica de lo sucedido en Los Alfaques puede encuadrarse en la teoría de la relevancia causal, mantenida por el jurista alemán Beling. Esta teoría, asumida en España por varios teóricos -entre ellos el catedrático de la facultad de Derecho de Barcelona, Luis Córdoba-, establece una graduación entre las diferentes causas desencadenantes de un efecto concreto.

En el juicio no ha conseguido aclararse de forma suficiente las razones por las que el conductor del camión toleró la sobrecarga. En este sentido, parecen existir importantes lagunas sobre las relaciones comerciales de la empresa El Paular, de Puertollano, adonde se dirigía el camión siniestrado, con los transportistas de Cisternas Reunidas y con la suministradora de propileno, Enpetrol.

Las posiciones de las defensas en el juicio de Los Alfaques se han mantenido en una atribución recíproca de responsabilidades entre Enpetrol y Cisternas Reunidas. Graves infracciones de seguridad se han puesto de manifiesto por ambas partes.