Un mes después del robo de santa Lucía, desaparecen en Italia los restos de san Pío I

Los restos de otro santo han sido robados en Italia durante la noche del martes. Se trata de san Pío I, mártir de Aquilea. Sus huesos fueron robados de la urna que los conservaba en una pequeña capilla, en pleno campo de la localidad veneciana de Treviso, a unos kilómetros de Conegliano, al lado de las colinas de Cartizze, donde se produce el champaña más famoso de Italia.

Como en el caso del robo del cuerpo de santa Lucía, que desapareció el 7 de noviembre pasado en Venecia, este nuevo acto sacrílego se produce también en la misma región veneciana, una de las más católicas del país.Los secuestradores han enviado ya un mensaje a la agencia Italiana Ansa pidiendo a la curia de Treviso veinte millones de pesetas bajo la amenaza de "quemar los huesos del santo" si no es escuchada su petición.

La capilla de donde han sido robados los huesos de san Pío I pertenece a una familia privada: al médico cirujano Angelo Candiano, que la había heredado hace tres siglos de otro médico, el cual la había recibido como regalo del patriarca de Venecia por haberle curado de una grave enfermedad.

Este santo, como santa Lucía, aún en manos de los secuestradores, está lleno de leyenda. La gente asegura que en el cojín de madera sobre el que reposaba la calavera del santo existe un libro de profecías famosas que nadie se ha atrevido a tocar. Al parecer, hace dos siglos, el propietario de la capilla había decidido destruirla, pero en cuanto los obreros empezaron los trabajos se murió de repente. Desde entonces toda la gente de los alrededores ha corrido siempre a pedirle milagros al papa mártir.

Ya hace un mes, no se sabe si los mismos u otros ladrones, habían conseguido entrar en la capilla y robarle al santo los objetos preciosos contenidos en su urna. Ahora se lo han llevado a él. La policía piensa que se trata de expertos, porque han robado los huesos sin romper nada y dejando el relicario en perfecto estado, como si no hubiera pasado nada.

Y no se excluye que se trate de la misma banda que ha robado el cuerpo de santa Lucía, ya que el último mensaje llegado a la curia patriarcal de Venecia habla también de un rescate por los restos de la santa de veinte millones de pesetas, bajo la amenaza de quemar los huesos sagrados antes de la fiesta de Santa Lucía, que es el 13 de este mes.

Las autoridades eclesiásticas de Venecia y Treviso siguen diciendo oficialmente que "no pagarán", pero también en Treviso, como en Venecia, los fieles y devotos han empezado en seguida a recoger dinero para pagar a los ladrones.