Convergencia hará campaña en Cataluña contra la LOAPA

Convergencia Democrática de Cataluña (CDC) organizó ayer una conferencia de Prensa para presentar la campaña contra la ley orgánica de Armonización del Proceso Autonómico (LOAPA), que piensa desarrollar en los próximos meses hasta el momento en que dicha ley sea debatida en las Cortes generales. La campaña constará de unos setenta coloquios en todas las zonas de Cataluña, con apoyo de carteles y cuñas radiofónicas.«Está claro que la LOAPA afecta a los estatutos de autonomía», dijo en el curso de una conferencia de Prensa el presidente de CDC, Ramón Trías Fargas. Añadió a continuación que si esto era negado al principio por UCD y PSOE, ahora estaba siendo reconocido, aunque minimizado. CDC entiende que la mejor solución sería retirar la LOAPA y, como mal menor, modificar varios puntos que recortan el Estatuto catalán y otros estatutos.

«La campaña», siguió diciendo Trías, «va encaminada a concienciar al pueblo catalán de que se verán profundamente afectados si la LOAPA es aprobada».

Modificación de la ley

En el mismo sentido se manifestaron los portavoces de CDC en el Congreso de los Diputados y en el Parlamento catalán, Miquel Roca y Maciá Alavedra, respectivamente. El primero añadió que CDC no renunciaba a ningún tipo de acción para conseguir la modificación de la ley, incluidas las negociaciones con los partidos concertantes de la misma, UCD y PSOE. Asimismo afirmó que su actuación en el Parlamento de Madrid estaría determinada por el desarrollo de la LOAPA y que no apoyarían ninguna ley que la presupusiera, si bien -matizó-, negar los votos a UCD no suponía dárselos al PSOE.Respecto a los actuales cambios en UCD que afectan a la composición del Gobierno, Roca declaró que no creía que ello afectara a la LOAPA, ya que se trata de una ley proyectada por dos partidos y no por personas determinadas de esos partidos. En charla posterior con los informadores, Roca añadió que preveía elecciones anticipadas, sin poder determinar si serían en primavera o en otoño. Aceptó la posibilidad de que la LOAPA quedara congelada por la disolución del Parlamento sobre el mes de febrero, si bien, matizó, «conste que yo no digo que vaya a suceder.