Segurado pide mayores contactos entre Gobierno y patronal
El presidente de la Confederación Empresarial Independiente de Madrid (CEIM), José Antonio Segurado, criticó ayer en Madrid, durante la asamblea general anual de la organización, los escasos contactos que existen en la actualidad entre el Gobierno y la clase empresarial, y anunció su intención derogar a los respectivos presidentes, Leopoldo Calvo Sotelo y Carlos Ferrer Salat, un esfuerzo importante para que se produzca un entendimiento profundo entre los equipos dirigentes del Ejecutivo y de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales (CEOE).
"No es admisible", dijo José Antonio Segurado, "que un Gobierno no consulte a una organización patronal, y no es posible que una organización patronal no comprenda las grandes dificultades que tiene el Gobierno de una nación"."Me preocupan muchísimo", agregó, Ias incomprensiones que existen entre la alta clase política y los dirigentes empresariales. Puede ser que hayan existido errores por ambas partes. A nosotros, desde luego, nos parece que los errores han sido de la clase política, pero tal vez ellos piensen lo contrario. Espero que estemos a tiempo de corregir esta situación en aras del bienestar general".
Respecto a la situación económica general, el presidente de CEIM comentó que la política del equipo del Gobierno no sigue las directrices anunciadas por el presidente del Gobierno en el discurso de su investidura. Al respecto citó que se incumple la línea de no aumentar la presión fiscal, no se ejecuta la prometida reducción de gasto público y el incremento de tres puntos sobre la inflación en los créditos no se va a efectuar.
El presidente de CEIM, en el informe presentado a la asamblea general de la organización, criticó con dureza las previsiones del déficit inicial de 700.000 millones de pesetas para el año 1982. Al respecto comentó que, "de seguir la trayectoria de ejercicios pasados, contemplaremos cómo el conjunto de administraciones, sin incluir las empresas públicas, generan un déficit muy superior al billón de pesetas, magnitud absolutamente incompatible con los deseos políticos combinados de reducir la tasa de inflación, crear 350.000 puestos de trabajo y disminuir los costes financieros de las empresas".
Más adelante afirmó que el Estado adquiere cada vez más protagonismo en nuestra economía, y el presupuesto para 1982 constituye, sin lugar a dudas, "un serio obstáculo para iniciar, sobre bases sólidas, una recuperación económica para los que creemos en la iniciativa privada como motor básico de la misma".
Tras subrayar la abultada dotación (180.000 millones de pesetas, que suponen el 40% de la inversión pública real incluida en los Presupuestos Generales del Estado) al desarrollo de la ley orgánica de Financiación de Comunidades Autónomas (LOFCA), José Antonio Segurado calificó de intolerables los nuevos incrementos de fiscalidad (un 15% para el conjunto) anunciados por el Ayuntamiento madrileño.
El Acuerdo Nacional de Empleo lo calificó el presidente de CEIM como "hecho clave dentro de las relaciones laborales desde la celebración de la última asamblea general" de la organización. No obstante, defendió que el desarrollo del ANE se alejó en muchos casos de lo que fue su propia filosofía: la creación de puestos de trabajo y la contención del incremento del paro. Por ello, dijo José Antonio Segurado, la CEOE se vió obligada a suspender su presencia en la comisión de seguimiento del acuerdo. Entre los incumplimientos más relevantes señaló la ineficacia de la Administración en la tramitación, dentro de los plazos legales, de los expedientes de regulación de empleo.
El presidente de CEIM señaló, a este respecto, que "el hecho de la firma de un pacto secreto entre Gobierno y sindicatos, y la consiguiente inclusión en los Presupuestos generales del Estado de 800 millones de pesetas para las centrales sindicales CC OO y UGT no tiene paralelo en los países del área occidental y se enfrenta, directamente, con las directrices de la Organización Internacional de Trabajo (OIT)".
Respecto al futuro del ANE, el presidente aseguró que CEIM lo defenderá por filosofía y responsabilidad.
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