Se acentuaron las bajas

Las bolsas españolas mantuvieron la acusada tendencia negativa con que iniciaron las operaciones de la semana, acelerándose el proceso de generación de órdenes vendedoras, al que seguía con una dinámica sorprendente la retirada de las últimas órdenes de compra de inversores particulares.Los sectores industriales volvieron a ser de nuevo los que se vieron afectados de una forma más clara por la combinación de aumento de papel e inhibición de los compradores. En el mercado madrileño, el índice del sector químico perdía más de tres puntos, y el de siderúrgicas, 1,21. Sin embargo, las bajas se extendieron a todos los sectores e incluso los bancos se vieron afectados por una mayor presión del papel, sumando casi 82.000 acciones a la venta Banesto, y superando las 50.000 el Hispano. El resto de sus compañeros se movían en cantidades inferiores, aunque siempre superaron los 10.000 títulos. La posibilidad de que existiesen órdenes «hinchadas» se aceptó como lógica.

También las eléctricas se vieron sometidas a unos intensos procesos de realizaciones de beneficios. No obstante, estos valores entrarán en rentabilídades competitivas por la vía del dividendo en el momento que flexionen un poco más a la baja.

En definitiva, se diría que la acentuación de la debilidad puede acabar por generar un proceso comprador que interrumpa la racha bajista, precisamente cuando casi todos los pronósticos apuntaban la posibilidad de que las bajas se produjesen de una forma más pausada.