Luis Riera,
alcalde centrista de Oviedo, le dijo a don Juan de Borbón, al final de una de las partidas de mus jugadas en Asturias: "Alteza, la última vez que pasé cerca de su casa en Estoril no podía imaginarme que algún día jugaría con su alteza una partida. Tampoco me imaginaba en tonces que un gran político fuera casi tan buen jugador de mus como yo". Don Juan, que había demostrado un gran amor propio en el juego, le replicó: "Si usted sigue por ese camino, va a durar poco nuestra amistad". Todo comenzó en una cena celebrada en Oviedo. Durante la conversación, el conde de Barcelona comentó su gran afición por el mus. El gobernador civil, Ricardo Larrainzar, y el alcalde ovetense, Luis Riera, buenos jugadores también, le invitaron a una partida. Don Juan y Fernando Tapia, presidente de la Agrupación de Armadores y Navieros hicieron pareja frente al alcalde y el go bernador. Después de cuatro partidas celebradas durante dos días, el resultado final quedó en tablas. Los cuatro contendientes se comprometieron a jugar el de sempate en Estoril, próxima mente, informa José Manuel Vaquero.
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