39 detenidos en Las Palmas tras violentos incidentes provocados por la escasez de agua

Treinta y nueve personas fueron detenidas durante los enfrentamientos que tuvieron lugar en la noche del jueves en Las Palmas entre las fuerzas de la Policía Nacional y grupos de manifestantes que protestaban por la falta de agua en la ciudad. Paradójicamente, al mismo tiempo que se producían barricadas y el barrio de Escaleritas quedaba totalmente cerrado al tráfico, el concejal de Aguas del Ayuntamiento de Las Palmas, Santiago Falcón, declaraba en una emisora de radio local que a él le importaban poco los acontecimientos que estaban alterando el orden público.

Las protestas comenzaron por la mañana de forma pacífica, cuando millares de mujeres -muchas de ellas con sus hijos- y jóvenes obstaculizaron el tráfico de la avenida de Escaleritas, una de las más importantes de la capital. Por la tarde comenzaron a radicalizarse las continuas manifestaciones, hasta el extremo de llegar a una verdadera batalla campal. Numerosos jóvenes volvieron a cortar el tráfico, hicieron hogueras y rompieron semáforos y vallas publicitarias que luego utilizaron para realizar barrica das, con las que trataron de cerrar el paso a los jeeps de la Policía Nacional, cuyos agentes no pudieron controlar la situación hasta la madrugada de ayer.En toda la barriada de Escaleritas existían pintadas con el lema OTAN, no; agua, sí, que también fue coreado por los manifestantes, así como numerosas pancartas donde se leía Llevamos nueve días sin agua. Ante esta situación, la policía municipal trató de calmar los ánimos asegurando a los vecinos que habían recibido una comunicación del Ayuntamiento en la que se les decía que recibirían el agua inmediatamente. No obstante, los vecinos afirmaron que ya estaban cansados de promesas y que hasta ver en sus depósitos el deseado líquido no abandonarían sus protestas.

Por la noche se produjo la más dura intervención de la Policía Nacional, que empleó botes de humo y pelotas de goma contra los vecinos de la barriada. Según parece, varios manifestantes y dos miembros de la Policía Nacional tuvieron que recibir asistencia sanitaria por diversas heridas ocasionadas durante los enfrentamientos.

Sorprende en círculos políticos canarios el total silencio que mantiene el Ayuntamiento de Las Palmas en torno al abastecimiento público de agua. Hace ya varios días que existe malestar en diversos barrios de la ciudad por la falta de agua, mientras las autoridades municipales da la sensación de que no quieren enfrentarse con el problema. El desconcierto ha llegado hasta el punto de que el alcalde accidental, Rafael Martín, desconocía por completo las reservas de que disponía la ciudad de cara a estos meses de verano.