Instituto de la Grasa
En el número de ayer de su prestigioso diario, el profesor Primo Yufera, director del Instituto de Tecnología de Alimentos de Valencia y catedrático de la Escuela de Ingenieros Agrónomos de la capital del Turia, publica un interesante artículo sobre el asunto de la falsificación del aceite de oliva.Coincido con muchos de sus puntos de vista, pero discrepo grandemente de su criterio sobre el Instituto de la Grasa y sus derivados, de Sevilla.
En efecto, el señor Primo Yufera se lamenta de que no se haya requerido la colaboración del instituto citado. Uno se pregunta: ¿es que el Instituto de la Grasa, si tiene ya resuelto el problema, está esperando pacientemente a que le inviten a participar? ¿No será que, como se ha demostrado, nadie puede dar la solución? ¡Se ha tenido que pedir por favor al que manipuló el aceite que lo diga!
Parece más lógico que el repetido instituto de fama internacional, según el señor Primo Yufera, tampoco tiene nada que decir. Yo, personalmente, creo que muchos de estos centros, que fueron creados durante los cuarenta años, a la hora de ser útiles al pueblo que costeó su creación y funcionamiento, sirven de poco.
