Nuevo llamamiento de Banisadr a la resistencia contra Jomeini

El ex presidente iraní, Abolhassan Banisadr, envió ayer desde París un llamamiento a los "revolucionarios iraníes" para que se adhieran al Consejo de Resistencia creado por él y por el líder de la organización izquierdista Mujaidin e Jalq, Massud Radjavi, en su lucha de oposición al régimen de los clérigos. Abolhassan Banisadr, destituido de la presidencia iraní el pasado mes de junio, pedía en su mensaje a los "revolucionarios iraníes, que no se han doblegado al despotismo ni del sha Reza Pahlevi ni al de los religiosos que se unan al Consejo de Resistencia" y aseguró que "sólo queda un paso para llegar al objetivo final" de esta plataforma política.

El mensaje de Banisadr fue emitido para hacerlo coincidir con el aniversario del denominado viernes negro, que el 8 de septiembre de 1978 registró los acontecimientos que dieron origen al comienzo, de la revolución y al principio del desmoronamiento de la dictadura. de Reza Pahlevi, y que se cobró aquel día varios centenares de muertes en las calles de Teherán.

Por su parte el imán Jomeini aseguró en Teherán que su régimen es uno de los más firmes en un intento de minimizar la importancia de los atentados que han mermado la clase dirigente islámica en el país.

El ayatollah Ruhollah Jomeini, dijo que a pesar de los recientes; atentados, "la República Islámica de Irán es uno de los regímenes más estables del mundo. Ocho presidentes de Estados Unidos, fueron asesinados a lo largo de su historia" afirmó el imán Jomeini, para quien la prueba de la estabilidad del régimen iraní reside en que "cuando un dignatario, presidente o primer ministro, es asesinado en Irán, inmediatamente otro hombre le sustituye".

Jomeini, de 81 años, pronunció estas palabras durante la visita realizada a su residencia de Jamarand, al Norte de Teherán, por Mahdavi Kani, nuevo primer ministro, que sustituyó en este cargo a Mohamed Bahonar, recientemente asesinado.

Al menos 24 miembros de organizaciones de oposición iraníes fueron fusilados durante las últimas horas en la prisión de Evin, de Teherán y una veintena más de "contrarrevolucionarios", según la Prensa iraní, murieron en enfrentamientos armados contra guardianes de la revolución y gendarmes en varias ciudades del país, fundamentalmente en el área del Kurdistán.

La Prensa de Teherán dió cuenta ayer de nuevos atentados contra dirigentes del régimen islámico en distintos puntos del país. Un clérigo, encargado de la acogida de refugiados de la guerra irano-iraquí en la Universidad de Isfahan, fue muerto a tiros por dos desconocidos que viajaban en una motocicleta en las inmediaciones del recinto universitario.