Parálisis de una reforma

( ... ) Desde hace doce meses, Polonia vive en una situación de crisis permanente. Los que confiaban en que el reciente Congreso Extraordinario del Partido Comunista significaría un punto final a la crisis política, social y económica han sufrido un desengaño semejante al que tendrán los que esperan que la crisis pueda ser resuelta en el Congreso Nacional del sindicato independiente Solidaridad, convocado en dos etapas, para principios de septiembre y principios de octubre. ( ... ) ( ... ) El Partido Comunista y el Gobierno han sido incapaces de poner en marcha un programa de reforma de la economía. Interlocutores occidentales han relatado con bochorno las penosas situaciones que se producían en las negociaciones para aplazar las deudas: en varias ocasiones los funcionarios polacos no sabían ni tan solo el montante de sus deudas. "Y lo peor del caso -relataba uno de los banqueros occidentales- es que no parecían especialmente interesados en saberlo". ( ... )

Es cierto que se está elaborando un programa de reformas, pero la credibilidad de sus autores disminuye de día en día, porque nadie ve sus frutos. La producción no tan sólo no crece, sino que disminuye. Y los sindicalistas tienen razón cuando dicen que los aumentos de precios, por más necesarios que sean, tienen que ser una consecuencia y no una condición previa de la reforma. ( ... )

18 de agosto