Las iglesias cristianas reconocen en Lourdes haber perseguido a las otras confesiones

Los miembros de las distintas confesiones cristianas entonaron un mea culpa público en el día de ayer, dedicado por el 42º Congreso Eucarístico de Lourdes al ecumenismo.

Los católicos se acusaron de «intolerancia que a veces tomó la forma de persecución». Los anglicanos se arrepintieron de «haber perseguido a católicos y protestantes y de ser una Iglesia elitista». Los luteranos lamentaban haberse privado de la riqueza sacramental, y los ortodoxos sentían que la división impida a los cristianos acercarse a la misma mesa eucarística.A pesar del carácter ecuménico que Lourdes quería dar al congreso, la presencia ecuménica es más bien pobre. Los ortodoxos andan molestos por el trato privilegiado acordado a los ortodoxos católicos, y los protestantes franceses, que no han sido invitados oficialmente, se encuentran perdidos entre tanto fervor eucarístico y mariano, que no es lo suyo.

El congreso había sido precedido de un simposio celebrado en Toulouse, donde habían predominado los tonos críticos contra el colonialismo occidental. «Hay que acabar», decía el delegado de Costa de Marfil, «con la tutela y el clericalismo de Roma y de las iglesias madres, a fin de lograr la autonomía». Se espera con atención la presencia en Lourdes de Helder Cámara, el obispo contestatario de Recife (Brasil) para volver a poner en primer plano las exigencias culturales, religiosas y políticas del Tercer Mundo.

Juan Pablo II tenía previsto llegar hoy a Lourdes. Su ausencia obligada será compensada por la retransmisión por Eurovisión a las cuatro de la tarde, de un mensaje al Congreso Eucarístico. Radio Vaticano, al anunciar esta noticia, comentaba la neta progresión de las condiciones físicas del Pontífice Juan Pablo II.

La ausencia del Papa prevista antes del atentado que casi le cuesta la vida, ha deslucido la brillantez que esperaban los organizadores franceses. Contaban con 120 representaciones de otros tantos países y sólo han acudido 76. De los 35.000 aistentes (casi la mitad de los previstos), la parte que corresponde a los extranjeros es escasa. Italia ha enviado quince peregrinos inscritos, España, dieciséis; Suiza, diecisiete; Bulgaria, diez. Las cifras mayores corresponden a Bélgica. 1.605; Estados Unidos, 900; Portugal, 750; Alemania Occidente, 647, México, 228. En total. 7.360 extranjeros inscritos.