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Un "halcón" que pronuncia frases bíblicas

"Nunca me he encontrado tan bien, física y moralmente. Nunca me he encontrado en mejores condiciones desde hace cuatro años porque llevo a cabo un combate, y éste ha sido mi elemento durante toda mi vida", declaraba el primer ministro israelí, Menájem Beguin, de 67 años de edad, cuando los sondeos electorales empezaban a pronosticar en mayo su victoria electoral en los comicios legislativos.Un año antes, sin embargo, Israel Beled, de la coalición electoral nacionalista Likud, encabezada por el primer ministro, afirmaba que "Beguín es un hombfe fisicamente enfermo y moralmente afectado", y comparaba a los miembros del Gobierno con "los pasajeros de un vehículo conducido por un cardiaco".

De hecho, en marzo de 1977 y en septiembre de 1979, el jefe del Gobierno israelí padeció dos crisis cardiacas, pero la reincorporación a lo que él suele llamar su elemento no tardó en revitalizarle.

Beguin es un luchador nato. Nacido el 16 de agosto de 1913 en la ciudad polaca -ahora soviéticade Brest-Litovsk, su familia acomodada le enseñó la cortesía y las buenas maneras, "porque es una forma de expresar su respeto a los demás", explica su hermana Rachel Halperine".

A principios de los años treinta, y mientras cursa estudios en la facultad de Derecho de la Universidad de Varsovia y en la escuela hebrea, Beguin se adhiere al Movimiento de las Juventudes Sionistas-Revisionistas (Betar). En vísperas de la segunda guerra mundial accede incluso a la jefatura del movimiento extremista, que cuenta entonces con 80.000 militantes.

Con el estallido del conflicto, alemanes y soviéticos se reparten Polonia. Entre los primeros, que condenan a los judíos al exterminio, y los segundos, que se limitan a deportarlos, Beguin opta por estos últimos.

De camino, en 1940, hacia los campos de trabajo de Siberia, un compañero le dirá sin creérselo: "Esto es el principio de nuestro viaje hacia Eretz Israel (Israel bíblico)". Pero Beguin, convencido y confiado, le contestará: "Acaso sea una ilusión loca, pero puede también que la fe sea más fuerte que la realidad, porque la fe crea la realidad".

Y la fe creó la realidad. El ataque nazi contra la URSS incita a Stalin a liberar a los presos de Polonia, y Beguin se alista en 1941 en el ejército del general polaco Anders. Un año más tarde desembarcará, por fin, en Palestina, la "tierra prometida", pero bajo las órdenes de los británicos.

Con la invasión de Polonia por los ejércitos alemanes, Beguin asistió a la ejecución de su madre y de su hermano, en tanto que su padre caminaba hacia un río donde el ocupante alemán le ahogó mientras cantaba "Volveremos a Israel".

El fusil Beguin lo utilizará constantemente a partir de 1944, cuando el frente del movimiento terrorista Irgun Zvai Leumi (Organización del Ejército Nacional) declara la guerra a los brítánicos, convencido de que, según reza su comunicado, "el Dios de Israel, Dios de los ejércitos, nos ayudará".

Pero Beguin no sólo inicia las hostilidades contra los británicos, sino también contra los árabes e ipcluso contra sus propios hermanos judíos reagrupados en el Haganah (ejército clandestino judío), en torno a David Ben Gurion, y que desaprueban los métodos terroristas del Irgun.

Porque el Beguin que califica hoy día a la Organización para la Liberación de Palestina (OLP) de "puñado de asesinos" y de "nazis sedientos de sangre judía" no dudó en sus tiempos en recurrir al terrorismo para conseguir sus propósitos.

Sus más célebres hazañas las lleva a cabo en 1946, con la voladura del hotel King David, cuartel general de las fuerzas británicas, en la que murieron 75 personas, y, dos años más tarde, con el asesinato de los 250 habitantes del poblado árabe de Deir Yassin. La matanza provocó el primer éxodo árabe de Palestina, porque, como escribió el propio jefe del Irgun, "el pánico cundió entre los árabes ".

"No hay diferencia alguna entre los terroristas palestinos que realizaron la operación de Munich y ciertos responsables israelíes que, en 1946, volaron el hotel King David de Jerusalén; asesinaron al enviado de la ONU, Bernadotte, en 1948; no perdonaron la vida de las mujeres y niños durante la matanza de Deir Yassin en l948", escribe a principios de mayo Rudolf Augstein, director del semanario alemán Der Spiegel.

En 1978, MenáJem Beguin obtuvo en Oslo el Premio Nobel de la Paz.

A partir de la fundación del Estado hebreo en 1948, toda su carrera política transcurre en la oposición -excepto un breve período entre 1967 y 1970- hasta las elecciones de 1977, desde donde, con su oratoria matizada de citas bíblicas, firme como un general en actitud de revista a sus tropas, denuncia todas las concesiones, mejor dicho, las "traiciones" de los gabinetes laboristas. Una de ellas, el acuerdo de 1970 sobre la retirada parcial del Sinaí egipcio, le decidirá a dimitir del Gobierno de Unión Nacional, del que formaba parte.

Fue, sin embargo, Beguin quien en 1979 firmó con el presidente egipcio, Anuar el Sadat, el acuerdo de paz de Camp David. Pero no por eso el "halcón" se ha transformado en "paloma".

El 8 de diciembre de 1977, dos meses después de recibir a Sadat en Jerusalén, Beguin declaró en privado a una delegación oficial egipcia: "Nunca les hemos pedido que confirmen nuestro derecho a la existencia; este derecho lo tenemos. Nos ha sido dado por Abrahán, Jacob e Isaac" (Biblia de Jerusalén, Deuteronomio 9 P. 213).

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