Concluyó la elaboración del proyecto de estatuto para Aragón

La asamblea mixta de parlamentarios y diputados provinciales aprobó ayer el texto definitivo del anteproyecto de Estatuto de Autonomía de Aragón, en un interminable debate de dos días de duración que puso fin al dilatado proceso de elaboración.

Más de tres años separan el acceso de Aragón a la preautonomía (logrado al mismo tiempo que Galicia, Canarías y Valencia, e inmediatamente después de Cataluña y el País Vasco) de la aprobación del proyecto de Estatuto, cuestión en la que Aragón ha quedado ampliamente rezagado con respecto a la mayor parte de las comunidades españolas.En la elaboración del anteproyecto de Estatuto aragonés ha primado el posibilismo.

En este estado de cosas, la defensa de los ideales autonomistas pareció quedar encomendada al anterior presidente de la Diputación General, Juan Antonio Bolea, que presentó dos enmiendas a la totalidad y veinticinco al articulado y propugnó ardorosamente la consideración de Aragón como nacionalidad.

El clima de la larga asamblea fue muy duro en algunos momentos. La mayor tensión se registró el lunes, va de madrugada, al deliberar el punto más conflictivo del texto: la representación provincial en las futuras Cortes de Aragón. Existían dos alternativas dirigidas a equilibrar la mayor población de Zaragoza, una defendida por UCD y AP -que fue la triunfadora y que viene a dar a Zaragoza cinco parlamentarlos más que a las otras dos provincias- y otra que apoyaban PSOE y PCE, que fijaban la proporcionalidad entre habitantes y parlamentarios en una cifra no superior a 2,5.

La sorpresa surgió de UCD de Teruel -cuyo papel en el retraso autonómico de Aragón ha sido desde el principio decisivo-, que pretendió, junto a un sector de los centristas oscenses, apoyados por Bolea y por el Partido Aragonés Regionalista, volver a la representación igualitaria de las tres provincias.

Tras duras negociaciones entre los propios miembros de UCD y amenaza de abandono de los socialistas se llegó al final feliz: proporcionalidad, pero menos. Ayer por la mañana se pronunciaba al respecto el tercer disidente, el Ayuntamiento de Zaragoza, que sigue sin aceptar ni este ni otros términos de los acuerdos.

En definitiva, el anteprevecto de Estatuto de Autonomía de Aragón tiene ya el visto bueno de la asamblea para entrar en las Cortes. Consta de 6 títulos, con 63 artículos, 6 disposiciones adicionales y 11 transitorias. Establece que Aragón es una comunidad autónoma (elude la terminología de región o nacionalidad, aunque a veces aparece en el articulado la palabra regional), que tiene los siguientes órganos constitucionales: Cortes, Presidencia, Consejo de Gobierno, Tribunal Superior de Justicia y el justicia de Aragón (figura histórica que se asimila al defensor del pueblo). Las competencias son las que marca el artículo 148 de la Constitución, ya que, obviando los pronunciamientos, los partielos decidieron acogerse al artículo 143 como vía autonómica.