Sacerdote condenado por ejercer la abogacía sin título
El sacerdote Fernando Gomis Bonet ha sido condenado por la sección primera de lo penal de la Audiencia Provincial de Valencia a un año de prisión menor y 50.000 pesetas de multa por un delito de intrusismo. Había ejercido funciones de abogado desde 1977 sin ser licenciado en Derecho y el Colegio de Abogados de Valencia se querelló contra él por este motivo a principios de 1979.El sacerdote es licenciado en Derecho Canónico por la Universidad Pontifica de Comillas y está autorizado por el arzobispado de Valencia para ejercer como abogado en causas matrimoniales ante los tribunales eclesiásticos. Sin embargo, tenía un despacho de abogado en Valencia, y con esta profesión figuraba en el listín telefónico, así como en su correspondencia y tarjetas de visita.
Gomis Bonet, según recoge la sentencia dictada, asistía a consultas sobre temas jurídicos o canónicos y realizaba funciones propias de especialista en Derecho Civil, como la redacción de capitulaciones matrimoniales o de escritos en temas relativos a administración local.
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